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Mientras, su pueblo muere de hambre. |
Angel Mario Ksheratto
Nadie sabe, nadie supo. Leonardo Rafael Guirao Aguilar, junto con un grupo de ex priístas, ex petistas, ex perredistas y ex panistas armó una agrupación “civil”, “sin fines de lucro”, pero con abierta filiación política. Con el membrete de ésta “asociación”, Guirao Aguilar y sus seguidores, se mueven por todo el estado, prometen candidaturas, impulsan otras y aparentan ser una organización fuerte y con recursos propios.
La mayoría de los integrantes de la agrupación, sin embargo, son reconocidos por su capacidad para saltar de un partido a otro y para pescar uno que otro hueso en la administración pública. Todos dicen ser de la “generación del esfuerzo” y niegan poseer riquezas… Algunos que han sido alcaldes (como Enoch Hernández, ex edil de San Cristóbal de las Casas, por ejemplo) aprovechan la coyuntura para “demostrar” que no se robaron un centavo del erario.
Con todo, “Chiapas Verde”, hace uso de recursos millonarios; el último escándalo, la promoción de la agrupación en los calzoncillos de un boxeador, en una de esas peleas estelares de cualquier televisora idiotizante.
De acuerdo a las reglas comerciales de los organismos y televisoras promotoras de dichas peleas, el contrato para publicidad en esos eventos oscila entre los 100 mil y 200 mil dólares. Un aproximado de entre dos millones 600 mil y dos millones 800 mil pesos. Una suma bastante alta.
Guirao, por cierto, es alcalde de uno de los 28 municipios con mayores índices de pobreza extrema en Chiapas: Chilón, cuyo promedio per cápita, es considerado el más bajo en todo el país.
No obstante, su edil y líder de Chiapas Verde, hace uso excesivo de recursos de dudosa procedencia. Sí, dudosísimo origen. Si sus miembros más encumbrados se declaran “pobres” o de “bajos ingresos”, ¿de dónde sacó Guirao el dinero para promocionar a esa agrupación en un evento de talla internacional cuyos costos solo empresas transnacionales podrían pagar?
La primera sospecha que salta a la vista es que pudo haber echado mano del erario público. Es decir, está utilizando dinero del pueblo, lo cual es, desde el punto de vista que se le quiera ver, un delito que debe ser severamente sancionado. El mismo líder de Chiapas Verde, dice ser un hombre de modestos ingresos. No tendría entonces, capacidad financiera para tan ostentoso pago.
Grave resulta el asunto, toda vez que Chilón es un municipio sumamente pobre. Y que su alcalde esté, muy probablemente, sustrayendo los pocos recursos del municipio para pagarse caprichos superfluos, es algo que no se debe admitir, así sea éste, el hombre “más querido” de todo el gabinete.
Ahí debe hacerse una investigación o por lo menos, Guirao tiene la obligación moral y civil de explicar y demostrar de dónde está sacando recursos para promover una organización inútil. Y si no es del erario, ¿quién lo financia? ¿Qué oscuros intereses al margen de la ley están detrás de esa organización?
Hace algunos meses, Leonardo Rafael Guirao, anunció con bombo y platillo que había firmado un convenio de “transparencia” con el Instituto de Acceso a la Información Pública del Estado. En honor a ese convenio, debe transparentar esos gastos abusivos que solo denotan prepotencia y excesos burdos.
Por su parte, el OFS, el Congreso del Estado, la SFP y los demás organismos que dicen estar en la lucha contra la corrupción, deben activar todos los protocolos disponibles, si es que se quiere erradicar prácticas nocivas en la administración pública y que van contra los intereses de la ciudadanía. No hacerlo, sería caer en franca complicidad o cuando menos, habrán incurrido en negligencia e incompetencia para cumplir con sus obligaciones.
Basta ya de insultar a los chiapanecos; es una falta de respeto que recursos que bien pudieron haberse utilizado en beneficio de la gente, se tiren a la basura, como si acá estuviésemos con una economía sana, robusta y caminando.
IMAGINARIO.- Hablando del IAIP, versiones certeras hay en el sentido que la Consejera General, se niega rotundamente a dar cuentas sobre los gastos suyos en la dependencia. Grave la situación. amksheratto@hotmail.com