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| Lujambio, maestro de la simulación. |
Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Cuando la caballada está flaca, hasta las vacas locas entran al hándicap. Ocurría a menudo en la era del PRI; entonces como ahora, la simulación acompañaba los golpes bajo la mesa y los deslindes se sucedían unos a otros. Los aspirantes debían surcar la pasarela cuyo principal calificador, tenía desde Los Pinos, la carta marcada. Era un trámite de rigor y quienes participaban en éste, lo hacían bajo la resignación de por lo menos, haber pisado el redondel del gran circo en que se convertía la selección del sucesor presidencial.
Ocurre ahora en la ya casi extinta era del Partido Acción Nacional. Muchos son los caballos sobre la pista; todos flacos y hasta la cola de los otros. Uno a uno se han ido descartando. Primero, Javier Lozano… Ayer, Alonso Lujambio. El primero, sin chistar, se sumó a las aspiraciones de quien parece ser el caballo de casa. El segundo, solo se fue. Señal de inconformidad, dicen algunos. Pero la verdad es que todo indica que es parte del show.
Si no, no sería simulación. Alguien debe poner la cara dura para convencer al pueblo que se hace caso al dramático llamado a la unidad que ha hecho el dueño de la caballería en tiempos apremiantes. Espectáculo de doble pista: unidad partidista para alimentar el fantasma de la democracia y de paso, mandar un mensaje rudo al crimen organizado.
Curioso, muy curioso que el caballo al final de la cola, es el agraciado. El que lleva todas las de ganar. Santiago Creel Miranda y Josefina Vázquez Mota, hasta delante, pero con tintes de perdedores. No tardan en darse cuenta que la pista no es para ellos. Terminarán levantando la mano del colero. Es un hecho y nadie está en condiciones de ponerlo en duda.
Nada se distancia de la cultura del autoengaño que inauguró el PRI. Quizá la aportación innovadora del PAN es que todos los aspirantes han arrojado la capucha. No hay tapado ni as bajo la manga. De ahí, los acarreos y cargadas, son la misma cosa… Hasta con la misma gente y los mismos lugares. Discursos extraídos del País de las Maravillas; coqueteos con los viejos caciques sindicales, con quienes se hacen acuerdos susceptibles de ser revelados cuando el incumplimiento harta.
Mientras tanto, en las caballerías de enfrente, la confianza se desborda. Los tricolores, seguros de sí mismos, alimentan a un segundo caballo que esté en condiciones de competir. Estaba muy flaco. Ayer le dieron suficiente pasto para no echar sus precariedades al desprecio público. Manlio Fabio Beltrones, subió puntos en el gusto de los electores. Fue novedad tuitera, yutubera y feisbukera. Rompió records entre la fanaticada, aunque eso sí, el discurso fue poco convincente, aunque rico en ideas. Ideas que, todos lo sabemos, a la hora de la verdad, resultan más falsas que las enfermedades de los funcionarios públicos cuando son echados de sus puestos.
El caballo mayor, Enrique Peña Nieto, a disgusto. Sabe que del plato a la boca, se cae la sopa. Y muy probablemente, el relanzamiento de Beltrones, le traiga dolores de cabeza, pues a como están las cosas, si se convierte en un hueso duro de roer, solo tendrá una alternativa: compartir los espacios. Dejarle ir sería un suicidio político.
Y por último, la caballería perredista. Ahí la cosa es un poco más pareja, pero si se juzga por la desmedida ambición del caballo tabasqueño, podría llegar la sangre al río. Manuel Andrés López Obrador, ya ha dicho que a toda costa estará en las boletas presidenciales. Aún si la consulta interna le diera el triunfo a Marcelo Ebrard. Complicado panorama para la desvencijada izquierda, que desde hace años no encuentra a un líder nato, responsable, creíble, confiable.
A todo esto, si los caballos de los partidos grandes están dando pena y lástima, ¿cómo estarán los de los partiditos casi inexistentes? Tendrán que poner borricos. Por lo menos harán reír al respetable público.
Tarjetero
*** Para el gobernador Juan Sabines Guerrero, crear fuentes de empleo es sembrar paz y democracia. Lo dijo ayer en Comitán, donde entregó recursos para la puesta en marcha de 92 proyectos productivos. *** Por fin se hace justicia a maestros del CONALEP en Huixtla. Serán beneficiados con el pago de sueldos caídos, luego que fueron objeto de represiones durante la dictadura pablista. Tarde, pero se hizo justicia. *** Muy buena medida del Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez la de apoyar a los comerciantes que están siendo afectados por la remodelación de las calles del centro de la ciudad. Para lograrlo, se han instalado mesas de atención y análisis de posibles pérdidas para asumir los costos, se informó en un boletín de prensa. *** En Ocozocoautla, las cosas van de mal en peor. El actual edil, se queja la gente, solo se la pasa de parranda en parranda mientras que la población carece de servicios elementales. A ver si las dependencias encargadas de vigilar el gasto público de ese municipio, hace lo necesario para meterlo en cintura. De hecho, hay sospechas de desvíos de recursos pues hasta hace unos meses, Corzo era un maestrito haragán de la Preparatoria y hoy es un prominente hombre de negocios. *** ¡Ya chale! Todos los programas y proyectos que ha anunciado en las últimas horas el rector de la UNACH, Jaime Valls, ya estaban desde hace años. Pero en fin, habrá quien le crea. *** Muchas lagunas e imprecisiones en el caso del atentado terrorista en un casino de Monterrey. De no ser por la tenacidad y efectividad de algunos reporteros, no se supiera el nombre del dueño del Royal. Raúl Rocha Cantú, es el nombre del empresario, a quien todas las autoridades protegieron hasta el momento de su presumible huída. Por otro lado, ayer casi se deslindan de la versión sobre uno de los responsables, quien fue detenido y liberado hace un año, acusado de varios delitos graves. Y pareciera que tratan de sembrar evidencias de descargo. Algo huele mal en esa investigación. Muy mal. *** Al proponer una tregua en la mal planeada guerra contra el crimen organizado, ¿habló, Vicente Fox, a nombre propio ó quizá, en representación de un tercero interesado? Digo, porque el expresidente nunca se ha distinguido por tener ideas propias. Aunque siendo tan torpe la propuesta, hay quienes que aseguran que sí, sí es de él. Todo puede ocurrir. *** Luego nos leemos.
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