Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Jaime Valls, desvinculado de la Universidad. |
Hoy, las cosas son distintas; vemos una sucesión accidentada, vulgar y carente de sentido. Los aspirantes han hecho uso de todos los medios posibles para denostarse, desnudándose entre sí, lo cual habla de la pobreza moral de todos. En ese contexto, podemos estar seguros que ni uno ni otro, ni otro, están en condiciones adecuadas para dirigir una escuela que desde la tiranía pablista, ha sido objeto de saqueos deleznables. Para el colmo, hay sectores que no solo opinan, sino que apoyan la hasta ahora posibilidad que asuma la rectoría universitaria, el menos indicado de todos los aspirantes: Jaime Vals Esponda, en cuyo historial no se podrá encontrar ni un ápice de vinculación con la UNACH. Y si a su desarraigo añadimos su pésimo carácter, su total ausencia de carisma y su falta de sensibilidad, podemos augurar un periodo entre negro y gris de la universidad. Basta ver los nulos resultados en la alcaldía para darnos cuenta de lo fallida que sería su administración.
Los demás aspirantes, no están exentos de malas vibras. Ya mencionamos la vulgaridad en que han caído; eso los descalifica de plano. Jorge López Arévalo, Hugo Armando Aguilar y Julián Domínguez López Portillo, por mencionar a unos cuantos de los tantos que pelean como presa de caza la rectoría universitaria, no han sido finos en su campaña para lograr su muy personal objetivo.
Los tres, junto a Vals Esponda, han recurrido a la diatriba mediática y al mal uso de las nuevas tecnologías de la comunicación para lanzarse petardos embarrados de excremento que a la larga, manchan la empobrecida imagen de la UNACH, gracias a la pusilanimidad del actual rector, rescoldo de la tiranía pablista, impuesto ahí para socavar los principios y normas universitarias.
Para algunos, el asunto es echar a la calle a Ángel René Estrada Arévalo, sin importar quién asuma su lugar; para otros, la indiferencia es la mejor respuesta ante la posibilidad de una nueva imposición que sirva de dique para el avance de la UNACH. Ni unos ni otros tienen razón.
La sucesión debe ir más allá de los intereses de grupos; para nadie es secreto que a raíz del inaceptable saqueo de las arcas financieras unachenses, esa casa de estudios están prácticamente en bancarrota, pese a que han tratado de esconder esa realidad. Los derechos de maestros y estudiantes, han sido anulados por completo. El derecho de tener excelencia académica, tampoco existe. Para ahorrar y robar más, suponemos, se contrata a maestritos chafas, si mucha preparación y desechan a verdaderos eruditos en distintas materias.
Solo en Ciencias de la Comunicación, el nivel de estudios es como para niñitos de párvulos. Y eso, el mismo Víctor Carrillo Caloca, colega periodista, amigo y catedrático universitario, lo ha señalado reiteradamente en su columna “Tinta Fresca”.
Parece entonces que los que están detrás de la sucesión (léase la inoperante Junta de Gobierno), no ven más allá de la bola de dimes y diretes que ha surgido en estos días. Nadie está viendo hacia la excelencia; nadie hacia la dignidad, nadie hacia la verdaderas necesidades de ésta.
Eso es lamentable. Inadmisible. Porque no se trata de la dirección de un potrero, sino de la rectoría de una universidad donde, se cree, se prepara a los profesionales de mañana; donde s forja a quienes habrán de sostener al estado de Chiapas. ¿Qué garantía ofrece, por ejemplo, Jaime Vals Esponda si el pobre señor no conoce ni la ruta para llegar a la facultad de ingeniería? ¿O Julián Domínguez López Portillo si fue otro de los operadores de la dictadura pablista? ¿O Hugo Armando Aguilar que no sale de la botella? ¡Por favor! Deben darle seriedad al asunto. Deben ser consecuentes con el discurso. La famosa Junta de Gobierno de la UNACH, tiene la palabra: O la dignifican o terminan de bañarla de excreciones. Ellos tienen la palabra… ¿Tendrán los pantalones?
Tarjetero
*** No hay cosa más desagradable, putrefacta y sucia, que una persona que se burle del pueblo; ese es Onésimo Zepeda, obispo católico, a quien han acusado de diversos delitos relacionados con fraudes de escándalo. No hace muchos días, el sujeto éste cayó enfermo y, según algunos medios nacionales, desde su lecho, volvió a burlarse de la gente a la que, según las acusaciones, defraudó. En lo personal, ese tipejo me cae gordo por su petulancia, altanería, soberbia y estupidez. Me cae gordo por su hipocresía y porque ha utilizado a los pobres para hacerse millonario. Y ahora, peor, cuando dice que los pobres que lo acusan de fraude, tendrán que seguir soportándole, porque su mal, no es de muerte. ¿Esos son los hijos de Dios? Prefiero a los hijos del diablo porque al menos, son un poco más respetuosos de los demás. *** Hablando de curas y sinvergüenzadas, el Papa Benedicto, ya casi dobla las manos: dice que sí, que siempre sí se vale usar preservativo, siempre y cuando el usuario, demuestre que tiene SIDA. Poco a poco tendrán que adecuarse a la realidad. *** Terrible lo que sucedió en Colima. Mataron a un exgobernador. Y como siempre, no se sabe nada más que el hecho en sí. *** Pronto le tendré la negra historia de una funcionaria estatal. El dinero del pueblo, mal utilizado. *** Ni bien se han sentado los nuevos diputados y ya empezaron a hacer mamarrachadas. Los pleitos por el sueldo, comisiones y viáticos, ya son como para regresarlos a sus casas. Y es que solo para eso sirven: para acaparar cuánto dinero les sea posible. *** Luego nos leemos.
ksheratto@hotmail.com
ksheratto@gmail.com