Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Mientras Pablo disfrutaba
la goleada de México sobre
Paraguay, en el Congreso
de la Unión daban entrada
a una demanda de juicio
político por actos de corrupción.
Para muchos no ha sido sorpresa la aparición del exdictador Pablo Salazar en los graderíos de un estadio venezolano, al lado de directivos del fútbol nacional y una mujer que, oficialmente, no es su esposa. Esto último sale a colación porque el exdictador siempre ha presumido su “línea directa” con la religión evangélica, cuya norma de conducta respecto a la moral pública de los integrantes de las distintas denominaciones, es la de mantener inquebrantables los votos matrimoniales, norma que incluso, el Apóstol San Pablo (nada qué ver con el susodicho) mencionó constantemente en sus epístolas, dando siempre consejos sobre la fidelidad y el respeto pleno a la esposa.
Aunque es asunto privado y muy personal, no deja de llamar la atención pues con ello, se confirman sospechas que rompen los hilos amistosos y van más allá de las relaciones públicas normales que en Chiapas han sido comidilla de todos los días. De ahí la obligatoriedad, ahora, de ahondar las investigaciones sobre la espantosa corrupción en que se movió la dictadura salazarista y que alcanza no solo a sus hermanos, sino a colaboradores cercanos y personajes ligados de las más diversas maneras.
Independientemente de con quién o quiénes haya estado el tiranito en la patria del dictador Chávez, lo que debe llenar los espacios es el otro asunto, el que realmente impacta y es el relacionado con la aceptación del Congreso de la Unión de una demanda de juicio político en contra de Pablo Salazar, cuyas actuaciones como mandatario, se asemejan en mucho a la de Mario Marín en Puebla y que por esa y muchas razones más, no puede quedar en el olvido. Las evidencias que Carlos Tapia y un sinnúmero de ciudadanos costeños, son más que suficientes para que los diputados finquen responsabilidades al exdictador. Sería un error histórico que la Cámara de Diputados Federales desechara las pruebas contundentes que se han presentado y sería un punto más para la corrupción, cuyas raíces en Chiapas, están a la vista de todos.
Si bien Pablo se mueve con absoluto cinismo, ello no debe incidir en los legisladores para presumir su inocencia, aunque no pondríamos en duda que “cabildee” monetariamente entre algunos legisladores para que salga bien librado. Sería la desvergüenza de todo el país que ello sucediera, pero conociendo al exdictador, no podríamos dejar fuera esa posibilidad.
Auditoria en marcha
Por otro lado hay otro asunto relacionado directamente con la corrupción del exdictador: el anuncio oficial de llamar a comparecer a los funcionarios del pablismo que tuvieron qué ver con la repartición de los casi 11 mil millones de pesos destinados para la reconstrucción del huracán “Stan” y que hasta ahora, nadie sabe dónde están. Según los cálculos del gobierno doméstico, poco más de 10 mil 800 millones de pesos no han sido encontrados en el rubro de gastos para atender los estragos de esa contingencia y por si fuera poco, nadie sabe tampoco dónde están los otros cientos de millones que fueron recaudados por organismos civiles e internacionales y que fueron enviados, oportunamente, a Chiapas para su distribución.
Ante el anuncio de la Contraloría General del Estado, trascendió ayer que los involucrados fueron llamados al “bunker” de los pablistas para atender las instrucciones dadas por los representantes de Rubén Velásquez y el ex dictador: No presentarse en virtud que los fondos a investigar son federales y por tanto, el Gobierno del Estado no tiene ninguna ingerencia para investigar el latrocinio cometido con esos recursos. Fuentes confiables relataron a éste columnista que la primer tarea será combatir “a periodicazos” al gobierno sabinista, especialmente a Francisco Sau y luego, hacer una declaratoria de “persecución política”. ¡Vaya argumentos para tratar de esconder sus raterías! Pero hay más: se ordenó la inmediata recaudación de facturas varias para ir justificando los gastos, aunque al final, cayeron en cuenta que la cantidad no podría justificarse con algunos cientos de vales de gasolina y optaron por buscar amparos federales para evitar, primero, acudir a las comparecencias anunciadas y segundo, evitar una eventual aprehensión. Así van las cosas de feas entre los pablistas involucrados en la corrupción por el huracán “Stan”.
Las cosas sobre los malos manejos de los recursos públicos, desde luego, no quedan ahí. Una investigación entre algunos alcaldes, arroja más datos sobre la corrupción en otros rubros. ¿Se acuerdan que los recursos de SEDESOL los manejó directamente Pablo Salazar? En ese jaloneo, recordemos que la entonces alcaldesa capitalina, Victoria Rincón Carrillo (el único acto bueno que le aplaudimos) se negó a permitir que el exdictador tocara ese dinero y por ello, el gobierno pablista inició una feroz persecución en su contra; lo mismo sucedió con Manuel Pano Becerra, por cuya razón fue echado de la alcaldía y de Tapachula, acusado de actos de corrupción que alcanzaron a gente inocente a la que hasta hoy, siguen sin entregar los bienes “incautados”. ¿Dónde está todo el dinero de SEDESOL (que son otros miles de millones anuales)? Ahí, la dependencia federal está obligada a realizar una investigación a fondo, pues muchas fueron las municipalidades que recibieron poco o nada. Acordémonos que en esos rubros venían decenas de programas sociales que no se ejecutaron. Otra rama de dónde colgar al chango, sin duda.
Tarjetero
*** Dicen que la eliminación del pablista César Serrano de la candidatura a la alcaldía tuxtleca, no fue tanto por sus ligas con el exdictador, sino porque descubrieron que éste encontró un desfalco financiero en el PAN desde los tiempos de Juan Carlos Cal y Mayor Franco y que el auxiliar contable Méndez Sarmiento pretendía ocultar, debido a su presunto involucramiento en ese asunto interno. Tan grave es el asunto, que por ahí, dicen, circula un documento comprometedor que podría ser la bomba mediática que termine con la dirigencia de Víctor y los pablistas-espinosistas que mantienen secuestrado a ese partido. *** Mi querido compadre Ariel Gómez, “El Chunco”, parece estar anunciando cierto jabón en polvo en sus gallardetes. Hasta se parece a “Mushú”, el dragoncito de “Mulán. *** Luego nos leemos.
http://www.columnasur.org
ksheratto@yahoo.com
ksheratto@hotmail.com
Angel Mario Ksheratto
Mientras Pablo disfrutaba
la goleada de México sobre
Paraguay, en el Congreso
de la Unión daban entrada
a una demanda de juicio
político por actos de corrupción.

Aunque es asunto privado y muy personal, no deja de llamar la atención pues con ello, se confirman sospechas que rompen los hilos amistosos y van más allá de las relaciones públicas normales que en Chiapas han sido comidilla de todos los días. De ahí la obligatoriedad, ahora, de ahondar las investigaciones sobre la espantosa corrupción en que se movió la dictadura salazarista y que alcanza no solo a sus hermanos, sino a colaboradores cercanos y personajes ligados de las más diversas maneras.
Independientemente de con quién o quiénes haya estado el tiranito en la patria del dictador Chávez, lo que debe llenar los espacios es el otro asunto, el que realmente impacta y es el relacionado con la aceptación del Congreso de la Unión de una demanda de juicio político en contra de Pablo Salazar, cuyas actuaciones como mandatario, se asemejan en mucho a la de Mario Marín en Puebla y que por esa y muchas razones más, no puede quedar en el olvido. Las evidencias que Carlos Tapia y un sinnúmero de ciudadanos costeños, son más que suficientes para que los diputados finquen responsabilidades al exdictador. Sería un error histórico que la Cámara de Diputados Federales desechara las pruebas contundentes que se han presentado y sería un punto más para la corrupción, cuyas raíces en Chiapas, están a la vista de todos.
Si bien Pablo se mueve con absoluto cinismo, ello no debe incidir en los legisladores para presumir su inocencia, aunque no pondríamos en duda que “cabildee” monetariamente entre algunos legisladores para que salga bien librado. Sería la desvergüenza de todo el país que ello sucediera, pero conociendo al exdictador, no podríamos dejar fuera esa posibilidad.
Auditoria en marcha
Por otro lado hay otro asunto relacionado directamente con la corrupción del exdictador: el anuncio oficial de llamar a comparecer a los funcionarios del pablismo que tuvieron qué ver con la repartición de los casi 11 mil millones de pesos destinados para la reconstrucción del huracán “Stan” y que hasta ahora, nadie sabe dónde están. Según los cálculos del gobierno doméstico, poco más de 10 mil 800 millones de pesos no han sido encontrados en el rubro de gastos para atender los estragos de esa contingencia y por si fuera poco, nadie sabe tampoco dónde están los otros cientos de millones que fueron recaudados por organismos civiles e internacionales y que fueron enviados, oportunamente, a Chiapas para su distribución.
Ante el anuncio de la Contraloría General del Estado, trascendió ayer que los involucrados fueron llamados al “bunker” de los pablistas para atender las instrucciones dadas por los representantes de Rubén Velásquez y el ex dictador: No presentarse en virtud que los fondos a investigar son federales y por tanto, el Gobierno del Estado no tiene ninguna ingerencia para investigar el latrocinio cometido con esos recursos. Fuentes confiables relataron a éste columnista que la primer tarea será combatir “a periodicazos” al gobierno sabinista, especialmente a Francisco Sau y luego, hacer una declaratoria de “persecución política”. ¡Vaya argumentos para tratar de esconder sus raterías! Pero hay más: se ordenó la inmediata recaudación de facturas varias para ir justificando los gastos, aunque al final, cayeron en cuenta que la cantidad no podría justificarse con algunos cientos de vales de gasolina y optaron por buscar amparos federales para evitar, primero, acudir a las comparecencias anunciadas y segundo, evitar una eventual aprehensión. Así van las cosas de feas entre los pablistas involucrados en la corrupción por el huracán “Stan”.
Las cosas sobre los malos manejos de los recursos públicos, desde luego, no quedan ahí. Una investigación entre algunos alcaldes, arroja más datos sobre la corrupción en otros rubros. ¿Se acuerdan que los recursos de SEDESOL los manejó directamente Pablo Salazar? En ese jaloneo, recordemos que la entonces alcaldesa capitalina, Victoria Rincón Carrillo (el único acto bueno que le aplaudimos) se negó a permitir que el exdictador tocara ese dinero y por ello, el gobierno pablista inició una feroz persecución en su contra; lo mismo sucedió con Manuel Pano Becerra, por cuya razón fue echado de la alcaldía y de Tapachula, acusado de actos de corrupción que alcanzaron a gente inocente a la que hasta hoy, siguen sin entregar los bienes “incautados”. ¿Dónde está todo el dinero de SEDESOL (que son otros miles de millones anuales)? Ahí, la dependencia federal está obligada a realizar una investigación a fondo, pues muchas fueron las municipalidades que recibieron poco o nada. Acordémonos que en esos rubros venían decenas de programas sociales que no se ejecutaron. Otra rama de dónde colgar al chango, sin duda.
Tarjetero
*** Dicen que la eliminación del pablista César Serrano de la candidatura a la alcaldía tuxtleca, no fue tanto por sus ligas con el exdictador, sino porque descubrieron que éste encontró un desfalco financiero en el PAN desde los tiempos de Juan Carlos Cal y Mayor Franco y que el auxiliar contable Méndez Sarmiento pretendía ocultar, debido a su presunto involucramiento en ese asunto interno. Tan grave es el asunto, que por ahí, dicen, circula un documento comprometedor que podría ser la bomba mediática que termine con la dirigencia de Víctor y los pablistas-espinosistas que mantienen secuestrado a ese partido. *** Mi querido compadre Ariel Gómez, “El Chunco”, parece estar anunciando cierto jabón en polvo en sus gallardetes. Hasta se parece a “Mushú”, el dragoncito de “Mulán. *** Luego nos leemos.
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ksheratto@yahoo.com
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