Exigen limpieza y mayor vigilancia
La aparición de los enormes óvalos,
alertó a los vecinos d ela colonia
Paseo del Bosque.
De la sorpresa, al temor y la zozobra; Gloria Morales Espinosa salió de su casa en busca de una gallina de la que sospechaba, estaba poniendo sus huevos fuera del nido. Y lo que encontró no fueron los huevos de su gallina, sino dos enormes huevos que la hicieron salir corriendo del terreno baldío que colinda con su casa en la colonia “Paseo del Bosque”.
Dio parte a las autoridades de Protección Civil Municipal, pero éstas solo llegaron a aconsejarle que esperara a que la madre de los enormes huevos regresara por ellos y se hiciera cargo de sus posibles críos.
Conforme pasaban las horas, los vecinos empezaron a entrar en pánico; y surgieron las sospechas del animal que pudo haber puesto las enormes bolas que se asemejan a un melón chino en tamaño y color.
Para algunos, podrían ser de una enorme boa que habita en esa zona densamente poblada; para otros, de algún descomunal cocodrilo que pudo haber escapado del zoológico “Miguel Álvarez del Toro”, ubicado a unos metros de dicha colonia. No faltó quien opinase que se trataba de los huevos de un avestruz e incluso, de un águila real.
Ninguna autoridad, sin embargo, se hizo cargo de los huevos; José Luís Fonseca, empleado de la administración del Mercado “San Juan”, tomó la decisión de llevarlos a su trabajo y ahí los mantuvo en exhibición, esperando que algún experto del Zoológico llegase a examinarlos y determinar a qué especie pertenecen. Nadie llegó hasta la una de la tarde, pese a que dieron aviso a la administración de ese lugar desde las ocho de la mañana.
Los vecinos, tras el extraño hallazgo, exigieron a las autoridades mayor vigilancia en la zona, así como el envío de cuadrillas de limpieza para evitar que sigan corriendo algún tipo de peligro, toda vez que temen que la madre de los huevos en mención, esté rondando por ese lugar.
La aparición de los enormes óvalos,
alertó a los vecinos d ela colonia
Paseo del Bosque.

Dio parte a las autoridades de Protección Civil Municipal, pero éstas solo llegaron a aconsejarle que esperara a que la madre de los enormes huevos regresara por ellos y se hiciera cargo de sus posibles críos.
Conforme pasaban las horas, los vecinos empezaron a entrar en pánico; y surgieron las sospechas del animal que pudo haber puesto las enormes bolas que se asemejan a un melón chino en tamaño y color.


