Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
El detestado senador,
junto a un grupo de
líderes evangélicos.
Justo cuando su reducido grupo de falderos empezaban la quema de incienso, las turbas del partido que dice representar en el Congreso de la Unión saltaron por todas partes para echarle en cara su salvajismo como funcionario público en la pasada dictadura salazarista.
Y es que Rubén Velásquez, como encargado de la política interna del pablismo no ha podido explicar muchos asuntos que quedaron al aire, como por ejemplo, la falta de políticas preventivas en casos de desastres y menos, mucho menos, la inversión que, se supone, se hizo durante las horas de emergencia por el paso del huracán “Stan”. Eso, independientemente de los recursos formales que envió la Federación y otras instituciones para efectos de reconstrucción.
Un extenso documento elaborado por la propia secretaría de Gobierno en los días de contingencia, revela la negligencia e indiferencia del titular de ésa área, especialmente con los damnificados de la Sierra y comunidades aisladas de la Costa. Por ejemplo, cuando por la mañana del día en que se desbordó el río Coatán, en el centro de la Ciudad de Tapachula, Rubén Velásquez –reza la bitácora–, dio órdenes precisas de “no utilizar recursos oficiales para evacuar a los habitantes de la zona baja” y emite la orden de concentrar todos los esfuerzos en evitar saqueos en los centros comerciales de la zona. Un exempleado de esa dependencia que fue consultado sobre la veracidad de dicho documento agregó en plática informal que el entonces secretario de Gobierno, dijo que los ciudadanos en riesgo, “al oír el ruido del agua, tendrán qué salir. Solo que sean muy pendejos se quedarán a esperar los madrazos”, afirma que oyó decir al funcionario.
En otra parte del informe interno, aparece un oficio sin número con el escudo del Estado de Chiapas en el calce superior izquierdo y el logotipo de ése ignominioso gobierno al centro de la hoja en el que se responde al llamado de auxilio de uno de los delegados en la zona Sierra al que solo identifican como “Señor Delegado” de la siguiente manera: “Las instrucciones precisas del C. Gobernador Constitucional a ésta Secretaría a mi cargo son que primero se deben atender las zonas prioritarias ubicadas en puntos estratégicos para evitar la ruina económica de la región. En su caso, le instruimos para que se coordine con otras delegaciones a fin de encontrar soluciones adecuadas para evitar el menor número de muertes posibles durante el tiempo que dure la contingencia. Confío en su capacidad para solucionar los problemas que me plantea, deseándole toda clase de éxitos en su labor”. Como vemos a Rubén Velásquez y al gobierno para el cual trabajo, lo importante era el dinero, no la seguridad de los ciudadanos en riesgo y menos, muchos menos, los que habitaban comunidades aisladas o aquellas que no estaban a la vista de los demás.
Razón de peso
De ahí que la andanada de menosprecio y rencor que muchos guardan tanto hacia Rubén como hacia Pablo y el resto de criminales que formaron parte de ese gobierno, esté fundamentada en actos deleznables que, como hemos dicho siempre, poco a poco van emergiendo. Como si su actuar hubiese sido digno y apegado a las necesidades de los gobernados, hoy intenta meter las manos en todas partes, incluso, en un partido que no es suyo, como el caso del PRD, donde pretende meter candidatos para, según él, formar su “estructura” política para alcanzar la gubernatura del estado, de la forma que sea.
Lejos de entrar en una etapa de compungimiento por las atrocidades que al amparo del poder cometió junto con la parvada de malos ciudadanos que lo acompañaron durante esos seis años de oprobios, sigue convirtiendo en andrajos su rebajada figura y llevando al matadero a unos cuantos ilusos que por ambición o ignorancia, le siguen los pasos aún a contracorriente de los anhelos de los chiapanecos. Ahora bien, si los perredistas se sienten ofendidos como dicen estarlo, lo políticamente correcto es que lo echen formalmente de las filas de ese partido, si es que, como él dice, es militante activo. Y si no lo es, simple y sencillamente que la dirigencia estatal se deslinde de él y hagan saber a la sociedad que el señor, no tiene autoridad moral (bueno, nunca la ha tenido) para tratar de dividir lo que por sí solo ha estado dividido desde que los burgueses tomaron el control de la izquierda chiapaneca.
Todo mundo sabe que el senador sin sesos ha estado atrás de la serie de actos desestabilizadores en la entidad, pero nadie se había atrevido a denunciarlo. Ahora hay un grupo que al parecer, tiene los pelos de la mula en las manos. Lo que debe venir es una actitud determinante. Digo, si es que los perredistas tienen la buena voluntad para deshacerse de la basura que les dejó Pablo. Si la quieren seguir manteniendo, allá ellos. La oportunidad ya la tienen. Es cuestión de hacerlo. Así de sencillo.
Tarjetero
*** Chiapas no es Yucatán. Así que nadie toque campanas por el triunfo del PRI en aquella entidad. Para empezar, allá posiblemente estén haciendo bien las cosas. Acá, siguen los mismos vicios y abusos. Tocar campanas ahora, es hacerse al “Tío Lolo”. Eso es más que claro. *** En Tapachula, la violencia está imparable. Y cómo no si las casetas de vigilancia de la policía son hoy, refugios para damnificados y uno que otro vival que, viendo la inoperancia de éstas, decidió darle un uso más práctico. Eso revela la falta de visión del actual alcalde que, como quiera que sea, dicen, tiene un pie en la cárcel, derivado de una serie de actos de corrupción en que ha incurrido. Barrios Zea, aparte de haber resultado toda una bazofia política, también ha resultado ser un tipo sin escrúpulos que lo único que ha logrado es llenar la ciudad de prostíbulos. Afortunadamente, los tapachultecos han sabido apreciar diferencias y eso será determinante a la hora de elegir al sustituto del otrora respetado doctor. Una encuesta seria, muy seria, ubica, por cierto, a Adolfo Zamora como el favorito. Ya le tendremos datos al respecto. *** Luego nos leemos.
http://ksheratto.blogspot.com
ksheratto@yahoo.com
ksheratto@hotmail.com
Angel Mario Ksheratto
El detestado senador,
junto a un grupo de
líderes evangélicos.

Y es que Rubén Velásquez, como encargado de la política interna del pablismo no ha podido explicar muchos asuntos que quedaron al aire, como por ejemplo, la falta de políticas preventivas en casos de desastres y menos, mucho menos, la inversión que, se supone, se hizo durante las horas de emergencia por el paso del huracán “Stan”. Eso, independientemente de los recursos formales que envió la Federación y otras instituciones para efectos de reconstrucción.
Un extenso documento elaborado por la propia secretaría de Gobierno en los días de contingencia, revela la negligencia e indiferencia del titular de ésa área, especialmente con los damnificados de la Sierra y comunidades aisladas de la Costa. Por ejemplo, cuando por la mañana del día en que se desbordó el río Coatán, en el centro de la Ciudad de Tapachula, Rubén Velásquez –reza la bitácora–, dio órdenes precisas de “no utilizar recursos oficiales para evacuar a los habitantes de la zona baja” y emite la orden de concentrar todos los esfuerzos en evitar saqueos en los centros comerciales de la zona. Un exempleado de esa dependencia que fue consultado sobre la veracidad de dicho documento agregó en plática informal que el entonces secretario de Gobierno, dijo que los ciudadanos en riesgo, “al oír el ruido del agua, tendrán qué salir. Solo que sean muy pendejos se quedarán a esperar los madrazos”, afirma que oyó decir al funcionario.
En otra parte del informe interno, aparece un oficio sin número con el escudo del Estado de Chiapas en el calce superior izquierdo y el logotipo de ése ignominioso gobierno al centro de la hoja en el que se responde al llamado de auxilio de uno de los delegados en la zona Sierra al que solo identifican como “Señor Delegado” de la siguiente manera: “Las instrucciones precisas del C. Gobernador Constitucional a ésta Secretaría a mi cargo son que primero se deben atender las zonas prioritarias ubicadas en puntos estratégicos para evitar la ruina económica de la región. En su caso, le instruimos para que se coordine con otras delegaciones a fin de encontrar soluciones adecuadas para evitar el menor número de muertes posibles durante el tiempo que dure la contingencia. Confío en su capacidad para solucionar los problemas que me plantea, deseándole toda clase de éxitos en su labor”. Como vemos a Rubén Velásquez y al gobierno para el cual trabajo, lo importante era el dinero, no la seguridad de los ciudadanos en riesgo y menos, muchos menos, los que habitaban comunidades aisladas o aquellas que no estaban a la vista de los demás.
Razón de peso
De ahí que la andanada de menosprecio y rencor que muchos guardan tanto hacia Rubén como hacia Pablo y el resto de criminales que formaron parte de ese gobierno, esté fundamentada en actos deleznables que, como hemos dicho siempre, poco a poco van emergiendo. Como si su actuar hubiese sido digno y apegado a las necesidades de los gobernados, hoy intenta meter las manos en todas partes, incluso, en un partido que no es suyo, como el caso del PRD, donde pretende meter candidatos para, según él, formar su “estructura” política para alcanzar la gubernatura del estado, de la forma que sea.
Lejos de entrar en una etapa de compungimiento por las atrocidades que al amparo del poder cometió junto con la parvada de malos ciudadanos que lo acompañaron durante esos seis años de oprobios, sigue convirtiendo en andrajos su rebajada figura y llevando al matadero a unos cuantos ilusos que por ambición o ignorancia, le siguen los pasos aún a contracorriente de los anhelos de los chiapanecos. Ahora bien, si los perredistas se sienten ofendidos como dicen estarlo, lo políticamente correcto es que lo echen formalmente de las filas de ese partido, si es que, como él dice, es militante activo. Y si no lo es, simple y sencillamente que la dirigencia estatal se deslinde de él y hagan saber a la sociedad que el señor, no tiene autoridad moral (bueno, nunca la ha tenido) para tratar de dividir lo que por sí solo ha estado dividido desde que los burgueses tomaron el control de la izquierda chiapaneca.
Todo mundo sabe que el senador sin sesos ha estado atrás de la serie de actos desestabilizadores en la entidad, pero nadie se había atrevido a denunciarlo. Ahora hay un grupo que al parecer, tiene los pelos de la mula en las manos. Lo que debe venir es una actitud determinante. Digo, si es que los perredistas tienen la buena voluntad para deshacerse de la basura que les dejó Pablo. Si la quieren seguir manteniendo, allá ellos. La oportunidad ya la tienen. Es cuestión de hacerlo. Así de sencillo.
Tarjetero
*** Chiapas no es Yucatán. Así que nadie toque campanas por el triunfo del PRI en aquella entidad. Para empezar, allá posiblemente estén haciendo bien las cosas. Acá, siguen los mismos vicios y abusos. Tocar campanas ahora, es hacerse al “Tío Lolo”. Eso es más que claro. *** En Tapachula, la violencia está imparable. Y cómo no si las casetas de vigilancia de la policía son hoy, refugios para damnificados y uno que otro vival que, viendo la inoperancia de éstas, decidió darle un uso más práctico. Eso revela la falta de visión del actual alcalde que, como quiera que sea, dicen, tiene un pie en la cárcel, derivado de una serie de actos de corrupción en que ha incurrido. Barrios Zea, aparte de haber resultado toda una bazofia política, también ha resultado ser un tipo sin escrúpulos que lo único que ha logrado es llenar la ciudad de prostíbulos. Afortunadamente, los tapachultecos han sabido apreciar diferencias y eso será determinante a la hora de elegir al sustituto del otrora respetado doctor. Una encuesta seria, muy seria, ubica, por cierto, a Adolfo Zamora como el favorito. Ya le tendremos datos al respecto. *** Luego nos leemos.
http://ksheratto.blogspot.com
ksheratto@yahoo.com
ksheratto@hotmail.com