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Terror en Chilón

Artículo Único
Angel Mario Ksheratto

Grupo de secuestrados por órdenes del edil. Foto tomada de RS.
Asesinatos, desplazados, desaparecidos, secuestrados; es el saldo de años de persecución política en Chilón, desde el año 2000, cuando se fortalecieron los grupos paramilitares, bajo el control de caciques políticos que fueron cambiando de partido, de acuerdo a sus intereses.
Según organizaciones sociales que han trabajado en las once comunidades de ese municipio, por lo menos 400 indígenas han sido despojados de sus propiedades y obligados a desplazarse a zonas inhóspitas o a otros municipios, donde sus condiciones de vida son cada vez más precarias y lo peor: donde no son vistos por las autoridades, negándoseles todo tipo de ayuda, aun la humanitaria.
El conflicto social en Chilón, ha sido azuzado por autoridades municipales, estatales, la iglesia y organismos como el Instituto Nacional de Antropología e Historia y el Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana, que han intentado imponer criterios en materia electoral, que chocan con los usos y costumbres, práctica ancestral que a la vez, ha sido seriamente cuestionada por los excesos cometidos bajo esa figura.
Sin ponerse de acuerdo en nada, las víctimas de ese conflicto han sido, como siempre, los más pobres, a quienes obligan a cumplir con exigencias que violan sus derechos humanos y restringen todas sus libertades, de tal manera que hoy, la cuota de sangre siguen poniéndola los desprotegidos, los que los políticos y demás interesados, solo utilizan para ganar elecciones.
En las últimas horas y derivado de lo arriba expuesto, 22 ciudadanos de la comunidad “San Antonio Bulujib”, fueron secuestrados por el agente municipal de esa comunidad, Martín Gómez Sánchez y Pedro Gómez Cruz, “dirigente” municipal del partido Movimiento de Renovación Nacional (MORENA).
Sin alimentos ni agua ni cobijo, las víctimas de esa acción, ha sido vejadas constantemente y torturadas sicológicamente por sus plagiarios, quienes intentan convencerlos de abandonar a las organizaciones civiles que los apoyan y no intentar participar en los procesos internos para elegir a sus autoridades comunitarias.
Según testimonios de los habitantes de San Antonio Bulujib, a las cuatro de la mañana de ayer lunes, hordas de hombres armados al mando del comisariado ejidal Miguel López Guzmán, apoyados por policías municipales vestidos de civil y bajo la muy discreta supervisión de funcionarios cercanos al alcalde Carlos Idelfonso Jiménez Trujillo, invadieron la comunidad y sacaron de sus casas a los “detenidos”, llevándoselos a rastras, amarrados y semidesnudos.
Es a todas luces, un secuestro, amparado bajo la falsa idea de los usos y costumbres, que tiene como fin, complacer a un alcalde que desde su asunción al cargo, no ha hecho otra cosa que asolar a la ciudadanía con miedo, terror, amenazas, persecución…
Hay que destacar que entre las víctimas de éste acto de terrorismo y dominación, hay por lo menos, tres ancianos que, aun estando postrados en cama por enfermedad, fueron llevados por la fuerza, sin que hasta este martes, se les haya suministrado medicamentos.
Intentamos contactar con el Ayuntamiento de Chilón para conocer su versión del asunto y sencillamente, nadie respondió. Sucedió lo mismo con la organización MODEVITE-Chiapas, cuyos dirigentes presumen la defensa de los pueblos indígenas de esa región, pero tampoco han respondido. ¿Intereses comunes con las autoridades a espaldas de sus “defendidos”? Vaya usted a saber.
Lo grave es que, otros grupos de campesinos, cansados de los abusos, nos dicen, están buscando la forma de rescatar a los secuestrados, lo que podría desatar una masacre que está a tiempo de frenarse, si las autoridades estatales intervienen y ponen orden.
En esa región, los conflictos, son cada vez más agudos. Es necesario y urgente que se cree una comisión multilateral para encontrar respuestas firmes. No hacerlo será convertirse en cómplices o en algo peor: ejecutores directos de una catástrofe social sin precedentes en el país.
Éstos son los nombres de algunas de las personas secuestradas en Chilón: Nicolás Hernández Gómez, Juan Pérez Gómez, M. Antonio Pérez Ruíz, Gaspar Aguilar Deara, Pedro López Pérez, Alonzo Pérez López, Sebastián Pérez Espinoza, Carlos Álvarez Jiménez, Víctor Álvarez Jiménez, Nicolás Mazariegos Pérez, Manuel Álvarez Hernández, Antonio Aguilar Pérez, Pedro López Gómez, Antonio Pérez López y Antonio Pérez López, entre otros.


Transitorio
Es ésta, mi opinión sobre el “informe” presidencial:

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