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| La anciana lideresa, arrastra pecados y maestros. |
Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Arrastrados por los intereses corruptos de Elba Esther Gordillo Morales, miles de maestros se oponen a la evaluación universal, una especie de examen de aptitud mediante el cual, debería tenerse certeza si los que cobran por estar al frente de un grupo de estudiantes, tienen la capacidad para ello. Un maestro me contó hace unos días que la evaluación es fácil; tanto así como un examen de cuarto grado de primaria.
No es entonces, una evaluación completa. Está entre la mediocridad y el engaño. Con todo y eso, los maestros se oponen por muchas razones: haraganería, ignorancia, irresponsabilidad, manipulación, desinterés…
Es revelador que el conglomerado de impartidores de “sabiduría” y “conocimiento” a las generaciones futuras, se niegue a demostrar capacidades, aptitudes e interés por el progreso del país. Hace algunos años, la lucha magisterial rondaba sobre la exigencia de una mejor capacitación para sacar a los países de América Latina de la ignorancia y la pobreza.
Los grandes movimientos que dieron base a las guerrillas en la región, eran de maestros ávidos de mayores conocimientos para ofrecerlos a sus alumnos. El Ché Guevara solía decir que los pueblos de América serían libres solo si la educación era de calidad. Miles, millones quizá, se unieron al sueño del luchador argentino.
Entonces, los maestros se instruían; leían cada pedazo de papel con letras que cayese en sus manos. Y exigían a sus gobiernos más escuelas para preparar mejor a los maestros; fue cuando en muchos países, se abrieron las universidades para mejorar la capacidad de los que enseñaban. Y se abrieron escuelas especializadas en preparar maestros.
Las huelgas magisteriales tenían un fundamento sólido: exigir ser mejores. Raras veces y en contados países, la exigencia primaria era la de mejorar sueldos o pedir reducción de horarios. Más aún, cuando en algunos países se impuso la modalidad de la “jornada única”, los maestros protestaron porque consideraron que era una medida para mantener a los pueblos sumidos en la ignorancia.
Hoy, los maestros son todo lo contrario. Sus plantones son para exigir más salario y que se les reduzcan las horas de trabajo. Y se enojan porque se les quiere hacer mejores en las aulas. Incomprensible. Eso sí, explicable: todos han tomado como propia la pelea personal de una dirigente corrupta e insensible que pretende mantener a los alumnos y maestros en los más bajos niveles educativos.
Curiosamente, muchos de los que se niegan a superar su ignorancia, son enemigos a muerte de la principal interesada en que la educación siga siendo de las más paupérrimas de Latinoamérica. Unidos contra la superación y calidad educativa, parece que los hace fuertes, pero no entendidos en una sociedad que no alcanza a madurar y no quiere ser exigente con un sector que se ha adueñado de la educación.
De ahí que no hace mucho, a manera de chivo, soltaron la idea que sí, aceptarían la evaluación universal, siempre y cuando, el gobierno esté dispuesto a aumentarles el sueldo. Eso, sin duda, es un chantaje que, según se sabe y aprovechando la coyuntura electoral, el gobierno les quiere comprar, lo que sería un duro golpe al país, pues se estarían fomentando antivalores y lo peor, se estaría alimentando al crimen organizado, pues, señores, si un grupo aparentemente organizado, chantajea y extorsiona a las autoridades, ¡es un delito!
Claro, es época de elecciones y tanto el gobierno como la estulta dirigente de los maestros, así como los candidatos interesados en captar uno que otro voto del sector magisterial, estarán encantados de cumplir caprichos y otorgar promesas que tarde o temprano, van a ser nocivas para los mexicanos.
Por lo pronto, los que se oponen a ser mejores, son solo carne de cañón, moneda de cambio que solo encontrará valor nominal, cuando acepten que México solo podrá ser grande, si sus maestros dejan atrás el descaro.
Hasta hoy, cualquier exigencia que tengan en mente, no tendrá cabida en una sociedad cansada de sus berrinches y abusos. ¿Con qué cara demandarán mejores salarios si ahora su emplazamiento es a seguir siendo burros con cátedra?
Tarjetero
*** Los partidos políticos ya están cerrando el ciclo de inscripción de precandidatos. En el PAN aparecen Juan Carlos Cal y Mayor Franco, Emanuel Nivón y el chiapabasqueño, Juan José Rodríguez Prats. Sobre éste último han llovido las críticas. Nunca ha vivido en Chiapas; siempre ha querido ser gobernador de Tabasco. En más de una ocasión ha tenido expresiones xenofóbicas contra los chiapanecos. En definitiva, Rodríguez Prats, no llena los requisitos para ser candidato. La Constitución establece que debe tener residencia efectiva. El patiño de Brozo, no la ha tenido ni siquiera afectiva. Ahí habrá qué revisar la constitución, no vaya a ser que el presidente Calderón quiera ignorarla deliberadamente. Porque el señor de Tabasco, no viene por su propia voluntad, sino por encargo presidencial para debilitar a Josefina Vásquez Mota, pese a que a Rodríguez Prats, lo han hecho “asesor” de la señora. *** En el PRI se inscribió ayer Manuel Velasco Coello, al igual que con el PVEM. Evidentemente, el Güero Velasco, va solo. Candidato de unidad, se dice en el PRI. *** Por el lado del PRD, el cochinero sigue su curso. Ni a quién creerle. *** La violencia contra las mujeres, se da en la mismísima policía. Resulta que Luis Mucel Luna, Director del Centro de Capacitación Policíaca, ha sido denunciado en múltiples ocasiones por discriminar y abusar de las mujeres asistentes a ese lugar. Cientos de cartas se han enviado a diversos lugares para denunciar al servidor público y nadie le hace caso a las mujeres, víctimas de éste sátrapa que, según documentos en poder de Fichero Político, las acosa sexualmente, pese que a su edad, no le funciona ni el cerebro. Mucel Luna es el tristemente célebre ejecutor de los violentos desalojos de indígenas que ordenó Pablo Abner Salazar, en los muchos ciudadanos inocentes perdieron la vida. ¿Habrá alguien con pantalones que le ponga un alto? *** Luego nos leemos.
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