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| Gamboa, espurio y sin control. |
Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Invadido de “junior’s” machetones, el Partido de la Revolución Democrática en Chiapas ha pasado de ser el partido de los pobres al de los rijosos sin causa, una escandalosa reunión de pillos en potencia, capaces de transgredir cualquier norma social sin tomar en cuenta el daño moral que hacen a una institución que gozó de la simpatía de miles de ciudadanos honrados y honestos y que hoy, está convertida en una vergonzante cueva de truhanes. De siempre, el PRD ha abierto la posibilidad a las llamadas corrientes “ideológicas”; algunas, como lo han demostrado, han sido eficaces y han acaparado una buena parte de confianza y credibilidad. Otras, sencillamente han servido para cobijar intereses mezquinos, ambiciones insanas y oprobiosas juntas de bandidos.
Tras el asalto de los junior’s, se crearon infinidad de “corrientes”. Ninguna, por cierto, ha podido entrar en el ánimo de los militantes y simpatizantes. Se han constituido, sí, en fuentes de engaño y simulación e incluso, en una especie de tráfico de influencias con ganancias sexuales, monetarias y de las más perversas índoles. Así, hemos visto infinidad de siglas que pululan entre los malo y lo peor de un partido político que sufrió una metamorfosis sin idea clara de la izquierda tradicional, aquella izquierda que ponderaba el bienestar de todos, aquel socialismo puro que movió masas en Europa y América Latina en los años 60’s, 70’s y 80’s.
Pero lo más lamentable no es que tales corrientes traten de imponer sus bajos instintos dentro del PRD, sino la actitud de sus “líderes” y en consecuencia, los podridos frutos que están arrojando y que dejan mucho más mal que bien. No hace muchos días, se desató el escándalo por la golpiza que Geovany Amaya, “dirigente” de una de tantas corrientes neo-desordenadas de ése partido, propinó a una dama en un lugar público, hecho del que se percataron decenas de ciudadanos.
Según los testigos, Amaya, no tuvo la menor de las consideraciones a la mujer, golpeándola como si hubiese estado dándose de golpes con un hombre. Las lesiones fueron graves al final. Hubo denuncia ante la agencia del Ministerio Público pero, se dice, ésta no ha procedido, debido al alto grado de impunidad que aún prevalece en el estado. Y a las influencias de las que gozan éstos rufianes con charola de “dirigentes políticos”.
Otro dirigente perredista, Miguel Zárate, fue también acusado de violación recientemente. Familiares y amigos de la víctima, se quejan de la lentitud con que avanza la denuncia. El argumento que han escuchado entre dientes de las autoridades es que Zárate, es un “influyente” político que ha movido sus influencias para que no proceda la denuncia. Arafat Nájera, otro de los líderes de corrientes perredistas, se encuentra en una prisión chiapaneca, acusado de haber falsificado documentos oficiales para la venta de candidaturas.
Una fuente judicial dejó entrever que Nájera habría sido sentenciado a 14 años de prisión por ese delito.
Otros dirigentes del PRD, junior’s, desde luego, son vistos con frecuencia en antros y restaurantes en actitud retadora y desafiante con el resto de comensales. De aquellos humildes dirigentes sociales que formaron al PRD en años pasados que comían en los comedores del mercado cuando bien les iba, se ha pasado a los dirigentes millonetas, muchos de éstos, con dinero del erario. Solo Geovany Amaya, de ser chofer de un regidor perredista, hoy anda en una lujosa camioneta, seguida de un Audi último modelo, repleto de guardaespaldas.
Todo eso habla de la falta de un liderazgo sólido, respetable, contundente, serio, responsable, inteligente. Desde que el PRD cayó en manos de la aristocracia sustentada en el erario, no ha podido ofrecer una oferta política congruente a sus militantes.
Si antes, los dirigentes perredistas pedían tierras para los campesinos, libertad de prensa y otras cuestiones para el pueblo, el actual “líder” de esa agrupación, exige en vergonzantes despliegues publicitarios, la devolución de una perra pulgosa que se le había perdido. Antes pedían comida, techo, un lugar digno dónde caer muertos. Hoy la cosa es para avergonzarse en serio.
¿Qué seriedad puede esperarse de un partido sin rumbo ni respeto por los demás?
Tarjetero
*** Sigue creciendo la sospecha que el último gran narcotraficante detenido, se entregó voluntariamente; esto le quita al Presidente Calderón la aureola de victoria que de inmediato colocaron en su testa los adoradores de imposibles. *** Con inconsistencias históricas, el gobierno se apresta a celebrar con fanfarrias el bicentenario de la independencia y la revolución. Pero, ¿hay de verdad un motivo para celebrar? Con tanta violencia, una economía estancada y el desempleo al alza, no creo que tengamos una sola razón para celebrar dos eventos que nos recuerdan precisamente que estamos igual o peor que hace 100 y 200 años. Por ahí, a alguien se le ocurrió la idea que éste año, en lugar de dar el grito, deberíamos guardar un minuto de silencio por los miles de muertos que ha ganado la violencia extrema que sacude al país. Y no le falta razón. ¿Para qué gritar “¡Viva México!” si miles de ciudadanos están muriendo sin más razón que la del Estado? *** Los estragos que las lluvias han dejado, son impresionantes. Pese al esfuerzo que las autoridades hacen para ayudar a los damnificados, parece que ante la fuerza de la naturaleza no hay mucho qué hacer. Pero todo es culpa de todos. No hemos cuidado el medio ambiente y ahí están las consecuencias. Ojalá a alguien se le prenda el foco y puedan replantear las políticas ambientales. *** ¿Cuál es la secretaría de Estado más apetecible para quienes quieren hacer negocios de alto nivel? Por ahí se rumora que un funcionario del primer círculo está poniendo piedritas a cierto Secretario para deponerlo y saltar a esa posición. Claro, es que los negocios en el ramo de los viajes aéreos son jugosos. *** Luego nos leemos.
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