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Los manglares, ¿destino turístico?

ksheratto@gmail.com El deterioro del medio ambiente, es desolador en la costa de Chiapas. D os de las seis especies de mangle en el litoral del pacífico están desapareciendo paulatinamente de la zona que comprende de Puerto Arista hasta Pijijiapan. La gente de por acá, dice desconocer las razones y trata de no comprender el término “extinción”. Saben, eso sí, que a lo largo de la costa hay regiones específicas donde los manglares son protegidos e incluso, las utilizan como atractivos turísticos, pero ¿a qué costo? “Aquí nos ofrecieron desarrollo turístico y entre los beneficios estaba la explotación de los manglares como destino turístico”, explica el lanchero mientras conduce hacia la zona donde según él, “ya solo se ve mangle rojo, blanco y uno que otro negro”. El conocido como “botoncillo” y el amarillo, solo se encuentra, muy esporádicamente, en regiones remotas de los manglares. Una especie más, recién descubierta, nunca la han visto. “Nos dijeron, pues, que había una n

Julión y el erario chiapaneco

ksheratto@gmail.com En lugar de pagar a Julión, deberían construirse escuelas dignas y cercanas. E l lenguaje sexista —públicamente condenado, pero práctica cotidiana en privado— es la razón por la que un afamado cantor de estribillos, esté en el ojo del huracán. La indignación desatada por el nacido en La Concordia y asumido sinaloense, tiene fundamento en la torpe idiosincrasia machista y en el hecho de exigir para sí, una mujer sumisa y esclava de los quehaceres domésticos, mientras que por otro lado, promueve el libertinaje y la infidelidad mediante la utilización de modelos dispuestas al sexo, las drogas y el alcohol. Completa incoherencia. No debería extrañarnos que Julio César Álvarez Montelongo, conocido en el inframundo de la atrofiada cantaleta como Julión Álvarez, externe frases misóginas u otras que denigran al ser humano y le demeritan a él como tal. Su mundo es así: pobre de moral y escaso de educación. Lo dicen las letras de algunas de las coplas que ronronea a

Contrato con PROACTIVA, bajo sospecha

ksheratto@gmail.com La única alternativa, revocar el contrato con PROACTIVA. S e preguntarán por qué afirmo que el contrato entre la contaminadora empresa PROACTIVA y el Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, está bajo sospecha de ser éste, un negocio turbio y que, por sus consecuencias nocivas al medio ambiente y por las rabietas de ambas partes en los últimos días, debe ser revocado de inmediato. Tengo frente a mí, copia de dicho contrato. En éste encontramos algunas inconsistencias que deben ser aclaradas. Se especifica que en cumplimiento al decreto 141, emitido por el Congreso del Estado, mediante el cual se autoriza al Ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez para concesionar el servicio de limpia, se celebra el contrato con la empresa denominada PROACTIVA, quien, según éste documento, cumplió con los requerimientos de la licitación respectiva. De esa forma, la empresa contratada acreditó tener, entre otras exigencias, “un sitio de disposición final”. Es decir, terreno propio dónde

De feminicidios y sospechas

@ksheratto No está dando buenos resultados. (Foto tomada de internet.) A la confusión, más confusión; el boletín de la PGJE donde se da cuenta de la detención del presunto “autor material” de la muerte de una adolescente en Pijijiapan, es escueto e insustancial para efectos informativos. Resalta la dependencia los tecnicismos de campo propios de una investigación criminal (que lo hace hasta en los discursos sentimentalistas), pero olvida pormenorizar, por ejemplo, en los probables motivos que tuvo el sospechoso para terminar con la vida de una joven. Y presenta al presunto implicado como a una bestia, ignorando la presunción de inocencia. No es mi intención defender al sujeto en cuestión. Deploro el procedimiento, las formas y métodos exaltados por la dependencia encargada de procurar justicia, mismos que han sido determinantes a la hora de dictar sentencia: insuficientes para alcanzar condenas adecuadas. Independientemente si el detenido cometió o no el crimen, la celeridad

Degradantes fotografías

ksheratto@gmail.com Debemos proteger los derechos de los niños. L as tragedias, per se, vienen acompañadas de altísimas dosis de dolor; las víctimas de éstas, por lo tanto, merecedoras son de respeto a su dignidad, principalmente si son niños. El lunes reciente, cuatro infantes —de entre dos y siete años de edad— murieron asfixiados dentro del cuarto que sus padres rentaban en una colonia de Tuxtla Gutiérrez. Triste. Lamentable. Doloroso. No había levantado el equipo forense los cuerpos de los menores, cuando ya circulaban en las redes sociales y algunos medios de comunicación, fotos de las cuatro víctimas. Las reacciones no se hicieron esperar; repulsa generalizada por la insensibilidad de quienes lucraban mediáticamente con la malaventura de una familia sumida en la desesperación. ¿Es correcto publicar fotos de las víctimas de una tragedia? ¿Es ético que un medio o periodista haga público material de esa naturaleza con el único objetivo de “tener la primicia” o cubrirse de

La petición de ERA PVEM y los consejeros del IEPC

Asesinato en Comalapa

De cómo DSJ extorsiona a acreedores

ksheratto@gmail.com Exige "comisiones" a proveedores. L as pronunciadas ojeras revelan en ella, una profunda desesperación; mientras habla, fija la mirada en el vaso de refresco que ha pedido y que no tocó durante la conversación. Pareciera no estar en éste mundo. El temblor de sus blancas manos acentúa su desesperanza y solo me ve a los ojos cuando pide, implora, exige —al gobierno del Estado— el justo pago por las proveedurías que dejaron de serlo al descapitalizarse la pequeña empresa que montó con su marido, casi desde que se casaron hace 22 años. —Mi marido se dejó morir; las deudas en que nos metimos para proveer a la secretaría de Salud de insumos, se volvieron cada vez más grandes y eso lo deprimió hasta dejar de consumir sus medicamentos —cuenta a punto de llanto y suelta una frase demoledora: “Si el gobierno nos hubiera pagado lo que nos debe, mi marido viviera… de eso estoy segura.” El Calvario que ha tenido que pasar para lograr que la secretaría de Sa

¿Es en serio, gobernador?

ksheratto@gmail.com Credibilidad rota por la corrupción. H e leído y escuchado con atención el discurso contra la corrupción y la impunidad —y, por supuesto, a favor de la transparencia—, que en días pasados pronunció el gobernador Manuel Velasco Coello. Partes hay que deben considerarse piezas de oratoria, dignas de cualquier ciudadano indignado por la pesada carga de corrupción que está arrastrando a éste país a la debacle definitiva. Me atrajo —y gustó sobremanera— esa parte en la que desglosa los nocivos efectos de la corrupción. Inmejorable. Ha hablado, el señor Velasco Coello, como el más ferviente persecutor de corruptos, lo cual abre una rendija para creer que, por fin, en Chiapas, habrá cárcel para quienes se hacen millonarios de la noche a la mañana. Me atreveré a decir que ni el más avezado luchador social contra los dos gigantescos cánceres que destruyen al otrora magnífico México (corrupción e impunidad), habría parido tan singular y contundente discurso. Dijo

Tila, secuestrado

ksheratto@gmail.com Se vive en ese pueblo, en estado de sitio. E l de Tila, es un conflicto añejo. Ningún gobernante quiso entrarle a una solución apropiada y duradera. Paliativos y promesas que fueron acumulando odios y rencillas que hoy, tienen a los pobladores de esa cabecera municipal, en un una posición de alto riesgo y permanente confrontación. El problema, dicen las autoridades gubernamentales desde la comodidad de las oficinas en la capital, es entre ejidatarios y el Ayuntamiento. En cierto modo, tienen razón en las explicaciones, pero carecen éstas de razón y credibilidad, en virtud de no tener un plan específico para poner fin a una reyerta de decenas de años y que se deriva de malas negociaciones políticas. En medio de ejidatarios y el Ayuntamiento, hay mucha gente que, sin deberla ni temerla, padecen las consecuencias de ese conflicto: los pobladores de la cabecera municipal, que no forman parte ni de los campesinos que reclaman como suyas las tierras donde se as