Fichero
Político
Angel Mario
Ksheratto
El “no se
despisten” de Peña Nieto, tiene dos lecturas obligadas: que ya tomó una
decisión sucesoria en la persona de José Antonio Meade, o el tapado permanece aún en las sombras. En
ambos casos, la incertidumbre es la mejor estrategia para mantener el control
absoluto de los hilos que sostienen al títere. Mientras, la disciplina priísta
está siendo impuesta, precisamente, para despistar a los opositores que siguen
reglas poco claras en torno a los métodos de elección de candidato a la
presidencia.
El
presidente sabe que la determinación que tome, incidirá en el rumbo que agarren
en la casa de enfrente, donde a pesar de las frecuentes negaciones, hay
infiltrados que tienen la misión de descarrilar el tren a favor del oficialismo
y del candidato que surja de Los Pinos. Incluso, en la permanente casa de
campaña de AMLO, esperan el destape del PRI, para tomar las providencias de
rigor, toda vez que, aunque López Obrador encabeza las encuestas, quien sea el
elegido, le moverá el tapete.
En ese
terreno, Chiapas no queda exento de las determinaciones presidenciales; de
cumplirse el pronóstico cuasi anunciado a favor de Meade Kuribreña, las
aspiraciones de José Antonio Aguilar Bodegas y Roberto Albores Gleason, podrían
caer en tierra en franco y veloz desplazamiento, toda vez que el probable
candidato presidencial, tiene otros amigos chiapanecos que podrían serle de
mayor utilidad, aunque en materia de votos, le resten posibilidades.
En ese contexto,
hay quienes ven al exalcalde tuxtleco y exrector de la UNACH, Jaime Vals
Esponda, como abanderado priísta, a pesar de haberse marchado al PRD para
contender por la alcaldía y seguir siendo, en teoría, un distinguido militante
de ese partido. Recordemos que el mismo José Antonio Meade, no es militante del
PRI y fue a su favor que se modificaron las reglas internas para permitir que
la convocatoria, incluya a simpatizantes.
Eso explica
por qué, tanto Aguilar Bodegas como Albores Gleason, bajaron de decibeles al
griterío que se traían e incluso, se sabe que los dos, buscan un acercamiento
para conjuntar estrategias y evitar que sean suplantados por un arribista. De
esa forma, es muy probable que veamos en las boletas a Roberto como candidato a
la gubernatura y a Josean, como aspirante al Senado, aunque el exalcalde
tapachulteco, también podría hacer una fórmula similar con Eduardo Ramírez
Aguilar, bajo otras siglas partidistas.
Así que para
despistados, los políticos chiapanecos que, otra vez, dependerán de las
decisiones presidenciales y las repercusiones que de ello se desprendan,
poniendo al estado bajo circunstancias repetitivas, que no ayudan para nada a
la tantas veces cacareada democracia. Por lo mismo, que nadie se extrañe con
los movimientos políticos que en los siguientes días se den.
La última
palabra
Mientras
tanto, el jefe máximo de la caballeriza local, no saca las manos de los
procesos internos partidistas, al grado que hasta en el partido más
recalcitrante, tiene a por lo menos, cinco aspirantes —aliados suyos—
dispuestos a jugar las cartas marcadas desde cualquier casa alterna donde
despacha.
Decir
entonces que tendremos una elección abierta y democrática, sería un abuso, una
exageración y un exabrupto, toda vez que ni uno solo de los que aspiran, goza
de independencia del Ejecutivo que, sin duda, pisa los terrenos del despiste a
que se refirió Enrique Peña Nieto, quien, se quiera o no, tiene la última
palabra.
En una
aspiración personal coinciden Peña y Manuel Velasco: gozar de una retirada sin
sobresaltos, ni persecuciones, ni exhibiciones mediáticas. Todos los aspirantes
priístas a la presidencia, tienen el compromiso “moral” de proteger las
espaldas de su actual jefe. Sucede lo mismo en Chiapas; solo quien garantice
inmunidad, tendrá la oportunidad de ser el sucesor.
Desde la
perspectiva ciudadana, la expectativa es al revés: se votará solo por quien
ofrezca justicia y arrastre a los tribunales a los responsables de la crisis
económica y de inseguridad. Pero hasta ahora, ninguno parece tener la intención
de cumplir con viejos anhelos de justicia.
Y mientras
la última palabra produce los efectos esperados, el señor Velasco presume su
capacidad de convocatoria con la que llamó la atención de no pocos, al reunir a
políticos de acá y acullá, en el festejo de un sacramento; las crónicas de los
convidados al ágape, son ricas en anécdotas y chascarrillos que, a pesar de su
frivolidad, denotaron la disposición del Ejecutivo Federal —presente en el
evento— a escuchar la voz cantante del papá del agasajado.
Claro que
ello despistó más a los políticos locales, principalmente, porque a algunos, no
les llegó invitación ni siquiera como franeleros;
los que tuvieron el privilegio de ser convocados, regresaron con una sonrisa de
oreja a oreja, sintiéndose los elegidos para una sucesión que puede estar ya,
pactada bajo la mesa de honor donde, por cierto, cuentan los cronistas socialeros, no permaneció por mucho
tiempo el bebé que motivó la reunión.
Por lo
pronto, en el Frente Ciudadano por Chiapas, el exdictador Pablo Abner, tiene
control absoluto de las piezas, pese a que la mayoría de integrantes del
adefesio político en que se ha convertido, son sabinistas de hueso colorado
que, todo indica, le empiezan a jugar torcido a Manuel Velasco, con todo y que
algunos, acuden puntualmente a cierta casa alterna a recibir su respectiva
mesada. Cosas peores se verán antes del fin del mundo.
Tarjetero
► A quien le están
jugando la vuelta con los dineros de la nómina, es al alcalde capitalino; son
muchas las quejas de empleados a quienes doña Cristina Palomeque, la tesorera,
no paga los sueldos, lo que empieza a generar descontento. Por otro lado, el
tema del no pago del impuesto al predial, empieza a verse desde el interior
como otro desliz financiero de la Tesorería, puesto que muchos que sí han
cumplido con esa obligación, se quejan que no les están haciendo válido los
pagos realizados. Menudo problema se les viene encima. ► Por necedad y abuso de
los que mantienen una caseta ilegal de cobro vial en Oxchuc, falleció un bebé
que era trasladado a un centro asistencial de ese municipio a San Cristóbal de
las Casas. Quien deba poner orden, que lo imponga. Imposible admitir cotos de
poder donde debería haber obediencia y cumplimiento de las leyes. No es mucho
pedir que regrese el Estado de Derecho. ► ¿Para qué alcanzan 8 miserables
pesos? Ni para una chuchería. Si acaso, para medio kilo de tortilla… si es que
se comiese una vez a la quincena. Pero para el presidente Peña Nieto, es un
gran logro. ¡Cínico! ► La recurrente violencia en el cercano Berriozábal, tiene
su origen en la complicidad de las autoridades municipales. No es nada del
orden común, nos dicen, sino que proviene de negocios lucrativos nada lícitos.
Las cosas se pueden poner peor. ► Paco Rojas pisará El Amate… Sí, irá a declarar
ante un juez en el caso de “encubrimiento” que le han endilgado. No es de
extrañar que en la efervescencia política, muchos otros tengan similares
problemas “legales”. ► Después de algunos años en el tintero, regresamos con
FICHERO POLÍTICO en su tercera época. Primero en el Diario de Chiapas, luego en
el Cuarto Poder y ahora, en Ultimátum, cuyo director, Amet Samayoa Arce, nos
abre generosamente las puertas, desde donde estaremos compartiendo con ustedes.
Agradecido por sus finas atenciones. ► Luego nos leemos.