Ir al contenido principal

Execrable ataque

Artículo Único

Angel Mario Ksheratto


Parte del grupo de periodistas premiados por El Senado de la República.
Sobre la caricatura, Juan David Posada, máximo exponente de las artes plásticas de Cuba afirma: “El retrato psicológico o caricatura personal es una de las más interesantes y llamativas manifestaciones del humorismo gráfico. Al observar al individuo, descubre la vida interna que existe en su exterior evidente.” El francés Charles Baudelaire, poeta, ensayista y crítico de arte profundiza: “Unas tienen la atención del historiador, del arqueólogo o incluso del filósofo. Las otras despiertan la atención de los artistas, destinadas a presentar al hombre en su propia fealdad moral y física.”
Enrique Alfaro está dentro de las consideraciones anteriores, que no son menores a su agudeza y percepción, lo que lo ha llevado a ser, ahora mismo, el caricaturista principal de uno de los medios digitales más importantes del país: Eje Central. Su crítica social y política está muy por encima de los estándares tradicionales, convirtiendo a su inteligente obra, en la mirada perspicaz del observador exigente.
No es el caso de quien ha hecho circular un ominoso vómito mediante el cual, ha pretendido desacreditar el reconocimiento otorgado por el Senado de la República a ocho periodistas chiapanecos, cuya trayectoria, talento, profesionalismo, capacidad, entrega y compromiso con los valores éticos del periodismo contemporáneo, son inexpugnables e incontrovertibles.
Si hablamos del periodismo femenino (y feminista) en la entidad, indefectiblemente tenemos que recurrir al intachable recorrido de Candelaria Rodríguez Sosa, quien fue, por muchos años, corresponsal de La Jornada y directora de El Observador, periódico que junto con la revista Ámbar y el semanario Signos, hicieron frente a la férrea dictadura de Patrocinio González Garrido. Rodríguez Sosa es un referente obligado en la lucha, desde el periodismo, para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres. Vilipendiarle es ultrajar los avances significativos de las mujeres en un mundo machista y discriminador.
Elba Narcia Cancino, es quizá, una de las pocas periodistas mexicanas que ha trabajado rectamente con la BBC de Londres, para la que trabajó desde Afganistán y Pakistán, así como en algunos países africanos. Incansable activista de los derechos de las mujeres, ha aprovechado la veta del periodismo para impulsar cambios determinantes que favorezcan la igualdad de géneros y el desarrollo de políticas públicas eficaces. Fue, en su momento, de las pocas mujeres periodistas que cubrieron el surgimiento del EZLN.
¿Así hubo uno que se ha atrevido a desprestigiar el esfuerzo senatorial colectivo para reconocer la capacidad creadora, innovadora de chiapanecas como doña Elba y doña Candelaria?
Enrique Romero es tenaz; testarudo en su forma de escribir. Ha hecho periodismo desde que tuvo ganas de plasmar sus ideas en un papel. Ha transcurrido por varias facetas del periodismo chiapaneco y es sin duda, un periodista con rasgos españoles que se asume maya. Y no por complacencia geográfica, sino por llamado de la sangre.
Sus textos van más allá de la denuncia simplista y el protagonismo egocéntrico. Aborda temas de su región con tal apasionamiento, que lo ubican como un luchador social que ha encontrado en el periodismo, la ruta perfecta para llegar a quienes deben atender la grave problemática de la Selva Lacandona. No es periodista por interés, sino por vocación, lo cual le da la categoría para ser considerado por un colegiado, apto para el reconocimiento público e institucional. ¿A él hay que cuestionarle un premio bien ganado?
Analista. Provocador. Irreverente. Insistente. A veces, rayano en la necedad. Carlos Z. Cadena es un periodista de referencia no solo en Tapachula y la Costa de Chiapas, sino en todo el estado. De profunda visión y precedido por una amplia y larga trayectoria profesional, no puede pasar desapercibido en el periodismo chiapaneco. Desde que le conozco, Z. Cadena es periodista.
Para todos, es el periodista. Ponderar sus aciertos como tal, hasta resultaría ocioso, porque no hay chiapaneco que no tenga certeza de lo que escribe y reporta; de lo que critica y alaba. Así es él. Por lo mismo tiene amigos y enemigos… ¡Pero es periodista de amplia —amplísima— trayectoria profesional! Reñirle por un bien merecido reconocimiento es ¡una estupidez!
El maestro Sarelly Martínez Mendoza, respetable académico e implacable y acucioso investigador del periodismo chiapaneco, visualiza a Mario Ruiz Redondo desde 1982, año en que empezó a gobernar Absalón Castellanos Domínguez. Desde ahí e incluso antes, Ruiz Redondo ha hecho periodismo en el convulso Chiapas. No es menos su trayectoria, principalmente si tomamos en cuenta que ha destacado como entrevistador de grandes personalidades de la política nacional e internacional.
Mario Ruiz Redondo, ha recibido, entre otras preseas, el Premio Nacional de Periodismo por su columna regional, en la que denuncia las precarias condiciones de pobreza y marginación de miles de mexicanos en el sureste del país. Rebatirle un reconocimiento del Senado, es no conocer la historia del periodismo de Chiapas. Ignorancia imperdonable.
Ligado desde hace años al trabajo pedagógico desde la literatura, el arte y la cultura, Raymundo Zenteno Mijangos, es por excelencia, un escritor y guionista preocupado por el futuro de las nuevas generaciones de chiapanecos. Nadie desconoce su lucha por mantener a flote proyectos interesantes y efectivos como Radio Ombligo, el proyecto icónico de un grupo de gente preocupada por los principios y valores de los chiapanecos.
Junto con radio Ombligo, Zenteno Mijangos ha ganado diversos premios en bienales internacionales destacando entre emisoras de Europa, Estados Unidos y América Latina. Michelle Obama, exprimera Dama de Estados Unidos, le entregó la presea “Coming Up Taller 2009”, por su trabajo para promover, desde los medios, el arte, la salud, la ecología. Restarle prestigio con una regurgitación (que no caricatura como se tantea), es burdo, tonto, indigno.
Si un periodista goza de la simpatía, el aprecio y el respeto de los chiapanecos, ése se llama Eleazar Domínguez Torres. El tío Cheletv. Enorme. Es un periodista que no busca protagonismos, sino el bienestar ciudadano. Sus reportajes sobre la problemática social de Chiapas, han logrado cambios en la actitud de los gobernantes, pero lo más importante es que ha podido solucionar problemas que por años, el gobierno había ignorado deliberadamente.
Demeritarle es cerrar los ojos ante un periodismo con carencias de distinta índole, pero que a pesar de todo mantiene, en Cheleazar, un punto de referencia sobre un oficio que con todo, sobresale a nivel nacional.

Quien ha intentado desacreditar sendos galardones, no merece siquiera ser mencionado. Porque desconoce la historia del periodismo chipaneco. Porque vomita sandeces de manera ruin y grotesca. Porque cree que en Chiapas, el periodismo debe nutrirse de brutalidades. Merece sí, ser llamado a la cordura, pero sobre todo, al respeto. Si tiene diferencias con quien, se supone, hizo las propuestas, las dirima frente a él, pero no insultando la inteligencia de los chiapanecos ni el trabajo de verdaderos periodistas. 

Las más leídas

Elba Esther Gordillo, sinónimo de corrupción y arbitrariedad

Fichero Político Angel Mario Ksheratto Cínica, la pseudodirigente magisterial no deja lugar a las dudas respecto a su debilidad por el dinero ajeno. Cuando hace unos días Elba Esther Gordillo Morales, dijo que vivía de su “modesto” sueldo como dirigente sempiterna de un grupo de maestros conocidos como “charros”, nadie le creyó; su larga historia de corrupción, mentiras, simulación y sometimiento, dijo rotundamente lo contrario. Ella misma se encargó de confirmar la incredulidad de los mexicanos, regalando doce camionetas de súper lujo a igual número de dirigentes estatales. Sin duda, un acto de inmoralidad espantosa que obliga a exigir a ésta señora, alejarse definitivamente de la espuria dirigencia que dice tener en sus manos. Vergonzosamente, en ese mismo evento la supuesta dirigente magisterial exigió al Gobierno Federal más presupuesto, según ella, para mejorar las paupérrimas condiciones de la educación en México. Imposible creer que ése dinero vaya a las escuelas de cartón que

Apunte sobre la entrevista Scherer-Zambada

Fichero Político Angel Mario Ksheratto "El narcotráfico está en toda la sociedad", dijo el capo de la droga al periodista Julio Scherer García, fundador de "Proceso". A juicio de uno de los capos más buscado y perseguido por los gobiernos de México y Estados Unidos, toda acción legal contra el narcotráfico, no modificaría el posicionamiento que han logrado y que, deja entrever, se ha alcanzado gracias a una de las enfermedades crónicas que padece el país: la corrupción. Frente al emblemático periodista mexicano, Julio Scherer García, uno de los referentes periodísticos de mayor trascendencia en América Latina, el capo suelta una verdad estremecedora, abrumadora, perturbadora: “el narco está en la sociedad”. Para los persecutores de éstos, la frase debería ser un reto; para los mexicanos, es desalentador. El flagelo ha permeado por todas partes, en todos los estratos sociales, en todos los rincones de la región. Es, quieran o no reconocerlo las autoridades de todos l

Las rabietas de MVC

Artículo Único Angel Mario Ksheratto D e manera imprevista, el senador golpea con fuerza el lujoso e impecable escritorio; suelta imprecaciones, enreda sus dedos en el cabello y, con los puños cerrados, vuelve a castigar al mueble en el que no hay un solo papel. —¡Es un malagradecido!, —explota y se queja—: ahora, ni la llamada me toma… Ni él ni sus funcionarios, ¡carajo! La urgencia de hablar con su sucesor —y no obtener respuesta—, tiene fundados motivos para enfurecerlo: seis de sus ex colaboradores, están siendo seriamente investigados y de al menos cuatro, se tienen evidencias claras de desvíos de recursos y uno, ya tiene orden de aprehensión, misma que, inexplicablemente, no se ha ejecutado. Aunque por lo pronto, las indagaciones de millones de pesos desviados no lo alcanzan a él, sí a sus funcionarios, lo que mediáticamente podría afectarle en sus aspiraciones para saltar del Senado al Gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador, desde donde pretende construir una