Ir al contenido principal

Calaveras 2016


ENOC HERNÁNDEZ CRUZ
Toc, toc, toc, toc…
—¿Se encuentra Enoc?
—¿Quién le busca con apremio?
—No vengo a entregar premio,
¡insolente! Llevarlo he al infierno,
y ponerle al menos, un cuerno.
—Ha ido a recibir un doctorado,
por el que tanta lana ha pagado.
—No por recibir un honor balín
habrá de escapar Tribilín;
esperaré su pronto regreso,
porque lo he de llevar tieso.

MANUEL VELASCO
De cirios cuatro charros,
panzones, feos y chaparros;

yace su cuerpo en medio del “foro”,
en el que gastó todo el tesoro.
Murió Manuelito de varios catarros,
en el infierno desquita despilfarros.
Amortajado con ropa de lentejuelas,
le lloran muchas tatarabuelas;
viudas, vírgenes y señoras chimuelas,
queman incienso y encienden candelas.
Descanse en paz el charro mayor,
que en el infierno no sienta terror
ni lo persiga ningún cobrador,
ni lo extorsione López Obrador.

EDUARDO RAMÍREZ

 Apareciósele vestida de chenalteca
¡Ah, que muerte tan totoreca!
¿Qué nos ves que el pobre Lalo
con ese traje, zurra ralo?
Muerto cayó el señor diputado,
sus aspiraciones flotan en el excusado;
a rastras lo llevan tres demonios vagos,
junto a un tal Carlos Penagos.
Reformas propone a Lucifer,
personaje sediento de poder…
—Eso aquí no se va a poder,
que en de tanto prometer,
los diablejos nos vestirán de mujer.
Cabizbajo quedó Lalo; silente,
frente al otro Satanás sonriente,
que en su nombre lleva penitencia:
ser gobernador en decadencia.
En una lóbrega y solitaria zanja negra
ha sido el legislador sepultado;
el pueblo afanoso se alegra
e implora que no quede ningún diputado.

PACO ROJAS
 A enterrar, en cajas de cartón,
llevan a Paco, el bocón;
como billete mal habido,
yace el candidato no elegido.
Topóse con la fea muerte
un día de mala suerte;
le velan entre urnas y maletas,
videos y mujeres muy coquetas.

ARMANDO MELGAR BRAVO
 Espantóse la catrina
al ver aquel arlequín;
parecía de estampa fina,
y resultó ser malandrín.
—A ti te hablo Armando,
y no te me pongas bravo;
vehemente te he estado buscando,
y te encuentro del erario, mamando.
Tomóle de la retorcida nariz
y así, barriendo el piso a raíz,
fue llevado al averno,
para su castigo eterno.
Gime por él, el payaso “Cepillín”,
que lo quiso como a rocín,
tanto por su parecido con él,
como por ya no estar en el carrusel.

ENRIQUE PEÑA NIETO
 Ganosa de joder al presidente,
despertó la flaca pestilente;
“jodido has a los mexicanos,
perdonado no has a tus cortesanos…
Habrán de comerte los gusanos,
aunque dejen de ser veganos”,
dijo la parca a don Quique.
—En sendas cosas no me implique,
señora majadera, burda y aristócrata;
mucho me jode la gringa demócrata,
para que venga usted y me la aplique.
—¡A callar imberbe presidentito!
tus protestas me valen un pito,
castigo cruel y eterno tienes en el hades,
recompensa por ocultar verdades,
comprar casas blancas
y saquear al país que embarrancas.

ZOÉ ROBLEDO ABURTO
 Llorando va el burgués,
el que promociona a la izquierda,
exige la aplicación del tres de tres,
y con nadie concuerda.
Hallólo la muerte en caminos errados,
repartiendo bonitos discursos,
y entregando zapatos usados,
por ser senador sin recursos.
Nadie lo ha librado de morir,
el averno es su final destino,
pagará por tanto mentir,
¡pobre Zoé, ahí se le quitará lo “fino”!

FERNANDO CASTELLANOS
 Con el hocico partido en mil,
arribó la muerte, agitada y hostil,
en busca de Fernando, el edil…
—Vengo por ése alcalde infantil
que tiene a la ciudad un cuchitril,
que no paga a un buen alguacil
y no pavimenta ni contrata un albañil.
—¡Pendejadas suyas!
No me traiga chismes ni elabore puyas;
esas son puras bullas
de los bustos chanchullas
que he llevado en mis patrullas.
—No te equivoques, querido Fernando;
tus argumentos salen sobrando,
desde nantes el pesebre andas pateando,
y no es por estar trabajando,
sino por andar, la gubernatura buscando.
Calló el presidente Castellanos,
miró tímidamente a los ciudadanos
y marchó como marchan los perenganos,
rumbo al reino de los gusanos.

ROBERTO ALBORES GLEASON
 En la apagada tumba de cuatro pisos,
reposa el apático cuerpo de Robertico;
la mataron sus actos omisos
y sus rebuznos de borrico.
Llevóle la parca al reino de su padre,
el temible y tenebroso Satanás,
para que pagase el vil desmadre
y del que ni en sueños, regresará jamás.
Tocóle a la senador Albores,
una muerte plagada de torpeza;
suicidio, decretaron los doctores,
“abandono”, proclamó O choa Reza.
Entre carbunclos, cenizas y llamaradas,
abátese el prolongado líder priísta;
unos dicen que son mamadas,
otros, que es un alquimista.
***

Las más leídas

Elba Esther Gordillo, sinónimo de corrupción y arbitrariedad

Fichero Político Angel Mario Ksheratto Cínica, la pseudodirigente magisterial no deja lugar a las dudas respecto a su debilidad por el dinero ajeno. Cuando hace unos días Elba Esther Gordillo Morales, dijo que vivía de su “modesto” sueldo como dirigente sempiterna de un grupo de maestros conocidos como “charros”, nadie le creyó; su larga historia de corrupción, mentiras, simulación y sometimiento, dijo rotundamente lo contrario. Ella misma se encargó de confirmar la incredulidad de los mexicanos, regalando doce camionetas de súper lujo a igual número de dirigentes estatales. Sin duda, un acto de inmoralidad espantosa que obliga a exigir a ésta señora, alejarse definitivamente de la espuria dirigencia que dice tener en sus manos. Vergonzosamente, en ese mismo evento la supuesta dirigente magisterial exigió al Gobierno Federal más presupuesto, según ella, para mejorar las paupérrimas condiciones de la educación en México. Imposible creer que ése dinero vaya a las escuelas de cartón que

Apunte sobre la entrevista Scherer-Zambada

Fichero Político Angel Mario Ksheratto "El narcotráfico está en toda la sociedad", dijo el capo de la droga al periodista Julio Scherer García, fundador de "Proceso". A juicio de uno de los capos más buscado y perseguido por los gobiernos de México y Estados Unidos, toda acción legal contra el narcotráfico, no modificaría el posicionamiento que han logrado y que, deja entrever, se ha alcanzado gracias a una de las enfermedades crónicas que padece el país: la corrupción. Frente al emblemático periodista mexicano, Julio Scherer García, uno de los referentes periodísticos de mayor trascendencia en América Latina, el capo suelta una verdad estremecedora, abrumadora, perturbadora: “el narco está en la sociedad”. Para los persecutores de éstos, la frase debería ser un reto; para los mexicanos, es desalentador. El flagelo ha permeado por todas partes, en todos los estratos sociales, en todos los rincones de la región. Es, quieran o no reconocerlo las autoridades de todos l

Las rabietas de MVC

Artículo Único Angel Mario Ksheratto D e manera imprevista, el senador golpea con fuerza el lujoso e impecable escritorio; suelta imprecaciones, enreda sus dedos en el cabello y, con los puños cerrados, vuelve a castigar al mueble en el que no hay un solo papel. —¡Es un malagradecido!, —explota y se queja—: ahora, ni la llamada me toma… Ni él ni sus funcionarios, ¡carajo! La urgencia de hablar con su sucesor —y no obtener respuesta—, tiene fundados motivos para enfurecerlo: seis de sus ex colaboradores, están siendo seriamente investigados y de al menos cuatro, se tienen evidencias claras de desvíos de recursos y uno, ya tiene orden de aprehensión, misma que, inexplicablemente, no se ha ejecutado. Aunque por lo pronto, las indagaciones de millones de pesos desviados no lo alcanzan a él, sí a sus funcionarios, lo que mediáticamente podría afectarle en sus aspiraciones para saltar del Senado al Gabinete del presidente Andrés Manuel López Obrador, desde donde pretende construir una