Discurso de Miguel González Alonso durante el II Congreso de Periodistas
El periodista chiapaneco, resaltó el interés
del gobernador Sabines por la libertad
de expresión.
Unidad fue la palabra que se repitió insistentemente ayer en la sesión de trabajo del Segundo Congreso Estatal de Periodistas.
"Hay que ser necios hasta alcanzar la unidad", sentenció una de las participantes, la señora Gloria D' Amico.
Unidad es coincidentemente la palabra; el llamado o piedra angular del gobierno de Juan Sabines a todos los sectores sociales para abatir los rezagos persistentes en Chiapas en todos los rubros y materias.
Bajo la premisa de que la unidad da buenos resultados, 12 agrupaciones de las 13 convocadas, y sus integrantes provenientes de todas las regiones del estado, con el testimonio de calidad del vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, Don Teodoro Rentería Arróyave; del presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, Roberto Piñón Olivas; del ex presidente de la FAPERMEX, José Antonio Calcáneo Collado; del experimentado comunicador Raúl Durán Cárdenas; de representantes de la Asociación Nacional de Locutores de México y de periodistas provenientes de los estados de: Tabasco, Guanajuato, Oaxaca y el Distrito Federal, deliberamos acerca de lo mucho que le falta al gremio por alcanzar en su relación con el poder, los patrones, la sociedad y nosotros mismos.
Con unidad ¡férrea! Más que con puros buenos propósitos, nos comprometimos ¡todos! a avanzar por la senda del respeto mutuo con la autoridad; a exigir seguridad social a los editores y radiodifusores ¡Nunca más un caso como el de Mario Álvarez!; a profesionalizarnos para cumplir mejor nuestra función social ¡con seriedad y responsabilidad! y a redactar, a la brevedad, un código de ética que evite excesos; que trace la raya -que hoy existe, pero pareciera que yace invisible- entre los periodistas y quienes usan la pluma, el papel y los micrófonos nada más… para el chantaje y la extorsión.
Lo vamos a alcanzar… inspirados en la sabiduría y fuerza que engloba la palabra: unidad.
Hace un año, nadie imaginó que, como resultado del primero de nuestros encuentros emanaran en lugar de quimeras, hechos tangibles: A un reclamo de don Teodoro Rentería, en el sentido de que la reforma para exonerar a los periodistas de los delitos de Difamación y Calumnia "había quedado corta" para con la sociedad, el poder, lejos de encolerizarse, con tolerancia e inteligencia, se comprometió a revisar el tema, y hoy, gracias al Primer Congreso de Periodistas; a la voluntad política del Gobernador Sabines Guerrero y al compromiso del Congreso, fueron desterrados del Código Penal los llamados delitos de prensa, pero se puso a salvo el honor de las personas en un apartado civil; la ¡vida privada de las personas! como lo establece, y lo exige, en su Artículo Séptimo la Constitución General de la República; nuestra Ley Mayor.
Planteada desde la Proclama de San Cristóbal y reiterado el argumento, en febrero pasado, acerca de la importancia de crear un ente inhibidor de delitos que se comenten en contra de periodistas; de una oficina investigadora de éstos ilícitos y exigente de penas a magistrados y jueces para proteger a los comunicadores de todo tipo de agresiones en el país con mayor riesgo –tan solo abajo de Irak- para el ejercicio de nuestra profesión, el 28 de septiembre, producto de una reforma constitucional promovida por el gobernador Sabines Guerrero se dio origen a la primera fiscalía en la República Mexicana con una ley orgánica y patrimonios propios para dar protección a los periodistas.
Bueno fuera que el periodismo organizado del país propusiera a los cerca de 20 mil agremiados de otras entidades de nuestra nación, que fuera promovida ante los señores gobernadores de otros estados y los Congresos locales, este modelo que en Chiapas rinde frutos y obtiene resultados; como también sucede con las reformas al Código Penal que castigan a toda autoridad que obligue a los periodistas a revelar sus fuentes.
Todos los avances en materia de libertad de expresión alcanzados hasta ahora en Chiapas -enumerados en esta apretada síntesis- a poco más de un año de iniciado el gobierno le han valido hoy, al gobernador Juan Sabines Guerrero, repercusión en esferas del Distrito Federal en donde solamente se escuchaban quejas y lamentos de los periodistas chiapanecos… pero muchas de éstas, la mayoría, hay que decirlo y subrayarlo, se escuchaban pero nunca fueron publicadas porque con dinero del pueblo se compraba silencio y conciencias para que no trascendiera la represión ni el autoritarismo que se ejercía desde el Palacio de Gobierno en contra de periodistas y medios de comunicación.
Es por eso que hoy la poderosa Asociación Nacional de Locutores de México le otorga a Sabines Guerrero su codiciado galardón: El Micrófono de Oro, en manos de su dirigente nacional mi amiga, la siempre solidaria Rosalía Buaún Sánchez.
De lo que también se habló hace un año es de la Casa del Periodista, espacio que habría de servir para ubicar: el Museo de la Caricatura; una aula multimedia que permita la capacitación a distancia de los periodistas, una biblioteca y un cibercafé para que los periodistas de escasos recursos puedan escribir sus notas. Eso se ofreció señor gobernador y nunca se edificó.
Señor gobernador, invitados especiales, compañeros, señoras y señores. Me acuso públicamente en este acto solemne de no haber dado trámite al ofrecimiento hecho por el mandatario Juan Sabines Guerrero en el auditorio del Centro Cultural "Jaime Sabines" hace un año y asumo toda la culpa ¡y pido que venga hacia mí la crítica! Por haber tomado esta decisión.
Estoy convencido de que hubiera resultado insensato, imprudente, estólido y hasta cretino promover la edificación de una casa para los periodistas cuando miles de chiapanecos, el año pasado, resultaron afectados por meteoros y fallas geológicas.
¡Insisto! Hubiera resultado insensible, inhumano e irreflexivo que los representantes de los medios de comunicación, quienes nos congregamos a pedir recursos y despensas a la sociedad para enviar ayuda humanitaria a nuestros hermanos tabasqueños y chiapanecos en desgracia ¡para quienes lo perdieron todo! promoviéramos algo… que podía esperar.
Queda claro. He aquí el culpable… nadie más.
Nadie puede preciarse de ser crítico sin practicar la autocrítica.
Soy de los que no le tiemblan las piernas para hacer señalamientos a poderoso alguno; reconocerle méritos, como tampoco para aceptar estoico en público mis yerros.
Amigos todos:
Recuerdo que en mayo del 2004 un amigo al que reconozco su verticalidad y honestidad pulcra, don Teodoro Rentería Arróyave, siendo presidente de la FAPERMEX nos ofreció "ASILO PERIODÍSTICO" conocida la gravedad y peligrosidad para ejercer el periodismo en Chiapas. Hoy, cuando el tiempo ha cambiado; cuando el clima es otro; cuando las cosas han cambiado sustancial y tangiblemente en Chiapas quiero aprovechar la tribuna para agradecerle ese apoyo, mismo que, hoy, los chiapanecos estamos en condiciones de ofrecerles a los periodistas de otros estados de la república en donde sus autoridades y los poderes fácticos los han convertido en la noticia… en la nota roja.
Concluyó el ciclo, me voy, pero no puedo hacerlo sin agradecerle a José Antonio Calcáneo; a Roberto Piñón, como ya lo hice con don Teodoro Rentaría, a todos ustedes compañeros de otros estados y a mis amigos periodistas chiapanecos todas las muestras afecto y solidaridad.
Nuestra meta inicial fue la de echar abajo la ley mordaza ¡cumplimos! ¡Así en plural! Fue la lucha y el esfuerzo de todos, por tanto el Frente de Periodistas de Chiapas se justifica en la historia
Lo alcanzado, alcanzado está. Lo que falta es compromiso de todos… en unidad.
Me voy del Frente de Periodistas de Chiapas. Me voy… pero me quedo con la frente en alto.
Me voy porque la democracia en una organización es fundamental.
Me quedo, no satisfecho, porque sigo comprometido con las causas gremiales, la FAPERMEX, su filosofía y sus dirigentes me han marcado para siempre esa ruta.
Me voy porque la voluntad; la conciencia de nuestra organización; los señores delegados eligieron de manera transparente y nítida a un grande del periodismo, quien con seguridad llevará a nuevos derroteros; por mejores senderos al Frente de Periodistas de Chiapas.
Me quedo tranquilo, de haber hecho lo que se pudo, nunca lo suficiente para quienes somos gente de retos y tenemos la mirada puesta en el porvenir.
Me voy porque al FREPECH le llegó la hora de renovarse con un individuo en quien aplica la conseja napoleónica de que "la grandeza de un hombre se mide de la cabeza al cielo"; con Ángel Mario Ksheratto Flores, quien tiene un gran compromiso con todos los periodistas que clamaron ¡libertad! ¡Libertad! ¡libertad! Tres veces: las dos ocasiones en que estuvo preso y la otra en que fue víctima de un secuestro perpetrado por la autoridad.
Me quedo, porque todavía hay mucho por hacer.
Me voy… pero me quedo, a cumplir con la encomienda que me indique; que me ordene el presidente de mi muy querida organización: Ángel Mario Ksheratto, quien enseguida tomará protesta.
Me voy, pero no sin antes agradecer al señor gobernador Juan Sabines Guerrero su amistad y apoyo decidido e incondicional para poder llevar a cabo los congresos de periodistas chiapanecos, que ¡es un hecho! Ya han servido gremio y a la sociedad en su conjunto… La historia ya lo consigna... y ésta es siempre quien tiene… la última palabra.
Lo dicho, dicho está.
Pronunciamiento del periodista Miguel González Alonso, Premio Nacional "México" de Periodismo durante el acto de clausura del Segundo Congreso Estatal de Periodistas. Marzo 8 de 2008, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
El periodista chiapaneco, resaltó el interés
del gobernador Sabines por la libertad
de expresión.
Unidad fue la palabra que se repitió insistentemente ayer en la sesión de trabajo del Segundo Congreso Estatal de Periodistas."Hay que ser necios hasta alcanzar la unidad", sentenció una de las participantes, la señora Gloria D' Amico.
Unidad es coincidentemente la palabra; el llamado o piedra angular del gobierno de Juan Sabines a todos los sectores sociales para abatir los rezagos persistentes en Chiapas en todos los rubros y materias.
Bajo la premisa de que la unidad da buenos resultados, 12 agrupaciones de las 13 convocadas, y sus integrantes provenientes de todas las regiones del estado, con el testimonio de calidad del vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, Don Teodoro Rentería Arróyave; del presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, Roberto Piñón Olivas; del ex presidente de la FAPERMEX, José Antonio Calcáneo Collado; del experimentado comunicador Raúl Durán Cárdenas; de representantes de la Asociación Nacional de Locutores de México y de periodistas provenientes de los estados de: Tabasco, Guanajuato, Oaxaca y el Distrito Federal, deliberamos acerca de lo mucho que le falta al gremio por alcanzar en su relación con el poder, los patrones, la sociedad y nosotros mismos.
Con unidad ¡férrea! Más que con puros buenos propósitos, nos comprometimos ¡todos! a avanzar por la senda del respeto mutuo con la autoridad; a exigir seguridad social a los editores y radiodifusores ¡Nunca más un caso como el de Mario Álvarez!; a profesionalizarnos para cumplir mejor nuestra función social ¡con seriedad y responsabilidad! y a redactar, a la brevedad, un código de ética que evite excesos; que trace la raya -que hoy existe, pero pareciera que yace invisible- entre los periodistas y quienes usan la pluma, el papel y los micrófonos nada más… para el chantaje y la extorsión.
Lo vamos a alcanzar… inspirados en la sabiduría y fuerza que engloba la palabra: unidad.
Hace un año, nadie imaginó que, como resultado del primero de nuestros encuentros emanaran en lugar de quimeras, hechos tangibles: A un reclamo de don Teodoro Rentería, en el sentido de que la reforma para exonerar a los periodistas de los delitos de Difamación y Calumnia "había quedado corta" para con la sociedad, el poder, lejos de encolerizarse, con tolerancia e inteligencia, se comprometió a revisar el tema, y hoy, gracias al Primer Congreso de Periodistas; a la voluntad política del Gobernador Sabines Guerrero y al compromiso del Congreso, fueron desterrados del Código Penal los llamados delitos de prensa, pero se puso a salvo el honor de las personas en un apartado civil; la ¡vida privada de las personas! como lo establece, y lo exige, en su Artículo Séptimo la Constitución General de la República; nuestra Ley Mayor.
Planteada desde la Proclama de San Cristóbal y reiterado el argumento, en febrero pasado, acerca de la importancia de crear un ente inhibidor de delitos que se comenten en contra de periodistas; de una oficina investigadora de éstos ilícitos y exigente de penas a magistrados y jueces para proteger a los comunicadores de todo tipo de agresiones en el país con mayor riesgo –tan solo abajo de Irak- para el ejercicio de nuestra profesión, el 28 de septiembre, producto de una reforma constitucional promovida por el gobernador Sabines Guerrero se dio origen a la primera fiscalía en la República Mexicana con una ley orgánica y patrimonios propios para dar protección a los periodistas.
Bueno fuera que el periodismo organizado del país propusiera a los cerca de 20 mil agremiados de otras entidades de nuestra nación, que fuera promovida ante los señores gobernadores de otros estados y los Congresos locales, este modelo que en Chiapas rinde frutos y obtiene resultados; como también sucede con las reformas al Código Penal que castigan a toda autoridad que obligue a los periodistas a revelar sus fuentes.
Todos los avances en materia de libertad de expresión alcanzados hasta ahora en Chiapas -enumerados en esta apretada síntesis- a poco más de un año de iniciado el gobierno le han valido hoy, al gobernador Juan Sabines Guerrero, repercusión en esferas del Distrito Federal en donde solamente se escuchaban quejas y lamentos de los periodistas chiapanecos… pero muchas de éstas, la mayoría, hay que decirlo y subrayarlo, se escuchaban pero nunca fueron publicadas porque con dinero del pueblo se compraba silencio y conciencias para que no trascendiera la represión ni el autoritarismo que se ejercía desde el Palacio de Gobierno en contra de periodistas y medios de comunicación.
Es por eso que hoy la poderosa Asociación Nacional de Locutores de México le otorga a Sabines Guerrero su codiciado galardón: El Micrófono de Oro, en manos de su dirigente nacional mi amiga, la siempre solidaria Rosalía Buaún Sánchez.
De lo que también se habló hace un año es de la Casa del Periodista, espacio que habría de servir para ubicar: el Museo de la Caricatura; una aula multimedia que permita la capacitación a distancia de los periodistas, una biblioteca y un cibercafé para que los periodistas de escasos recursos puedan escribir sus notas. Eso se ofreció señor gobernador y nunca se edificó.
Señor gobernador, invitados especiales, compañeros, señoras y señores. Me acuso públicamente en este acto solemne de no haber dado trámite al ofrecimiento hecho por el mandatario Juan Sabines Guerrero en el auditorio del Centro Cultural "Jaime Sabines" hace un año y asumo toda la culpa ¡y pido que venga hacia mí la crítica! Por haber tomado esta decisión.
Estoy convencido de que hubiera resultado insensato, imprudente, estólido y hasta cretino promover la edificación de una casa para los periodistas cuando miles de chiapanecos, el año pasado, resultaron afectados por meteoros y fallas geológicas.
¡Insisto! Hubiera resultado insensible, inhumano e irreflexivo que los representantes de los medios de comunicación, quienes nos congregamos a pedir recursos y despensas a la sociedad para enviar ayuda humanitaria a nuestros hermanos tabasqueños y chiapanecos en desgracia ¡para quienes lo perdieron todo! promoviéramos algo… que podía esperar.
Queda claro. He aquí el culpable… nadie más.
Nadie puede preciarse de ser crítico sin practicar la autocrítica.
Soy de los que no le tiemblan las piernas para hacer señalamientos a poderoso alguno; reconocerle méritos, como tampoco para aceptar estoico en público mis yerros.
Amigos todos:
Recuerdo que en mayo del 2004 un amigo al que reconozco su verticalidad y honestidad pulcra, don Teodoro Rentería Arróyave, siendo presidente de la FAPERMEX nos ofreció "ASILO PERIODÍSTICO" conocida la gravedad y peligrosidad para ejercer el periodismo en Chiapas. Hoy, cuando el tiempo ha cambiado; cuando el clima es otro; cuando las cosas han cambiado sustancial y tangiblemente en Chiapas quiero aprovechar la tribuna para agradecerle ese apoyo, mismo que, hoy, los chiapanecos estamos en condiciones de ofrecerles a los periodistas de otros estados de la república en donde sus autoridades y los poderes fácticos los han convertido en la noticia… en la nota roja.
Concluyó el ciclo, me voy, pero no puedo hacerlo sin agradecerle a José Antonio Calcáneo; a Roberto Piñón, como ya lo hice con don Teodoro Rentaría, a todos ustedes compañeros de otros estados y a mis amigos periodistas chiapanecos todas las muestras afecto y solidaridad.
Nuestra meta inicial fue la de echar abajo la ley mordaza ¡cumplimos! ¡Así en plural! Fue la lucha y el esfuerzo de todos, por tanto el Frente de Periodistas de Chiapas se justifica en la historia
Lo alcanzado, alcanzado está. Lo que falta es compromiso de todos… en unidad.
Me voy del Frente de Periodistas de Chiapas. Me voy… pero me quedo con la frente en alto.
Me voy porque la democracia en una organización es fundamental.
Me quedo, no satisfecho, porque sigo comprometido con las causas gremiales, la FAPERMEX, su filosofía y sus dirigentes me han marcado para siempre esa ruta.
Me voy porque la voluntad; la conciencia de nuestra organización; los señores delegados eligieron de manera transparente y nítida a un grande del periodismo, quien con seguridad llevará a nuevos derroteros; por mejores senderos al Frente de Periodistas de Chiapas.
Me quedo tranquilo, de haber hecho lo que se pudo, nunca lo suficiente para quienes somos gente de retos y tenemos la mirada puesta en el porvenir.
Me voy porque al FREPECH le llegó la hora de renovarse con un individuo en quien aplica la conseja napoleónica de que "la grandeza de un hombre se mide de la cabeza al cielo"; con Ángel Mario Ksheratto Flores, quien tiene un gran compromiso con todos los periodistas que clamaron ¡libertad! ¡Libertad! ¡libertad! Tres veces: las dos ocasiones en que estuvo preso y la otra en que fue víctima de un secuestro perpetrado por la autoridad.
Me quedo, porque todavía hay mucho por hacer.
Me voy… pero me quedo, a cumplir con la encomienda que me indique; que me ordene el presidente de mi muy querida organización: Ángel Mario Ksheratto, quien enseguida tomará protesta.
Me voy, pero no sin antes agradecer al señor gobernador Juan Sabines Guerrero su amistad y apoyo decidido e incondicional para poder llevar a cabo los congresos de periodistas chiapanecos, que ¡es un hecho! Ya han servido gremio y a la sociedad en su conjunto… La historia ya lo consigna... y ésta es siempre quien tiene… la última palabra.
Lo dicho, dicho está.
Pronunciamiento del periodista Miguel González Alonso, Premio Nacional "México" de Periodismo durante el acto de clausura del Segundo Congreso Estatal de Periodistas. Marzo 8 de 2008, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.