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Los panistas, misóginos y antidemocráticos

Fichero Político

Angel Mario Ksheratto


Los coletos no tienen opciones
viables para elegir a su
alcalde municipal.

Ninguna opción se acerca a las aspiraciones de los electores de San Cristóbal de las Casas; por un lado, dos exalcaldes sospechosos de corrupción buscan el regreso triunfal que serviría de marco perfecto para reafirmar que en Chiapas se puede ser corrupto sin ser castigado y por otro, la incertidumbre del Partido Acción Nacional que hasta hoy, se niega a respetar los resultados de su accidentada encuesta interna dejando un claro reflejo de la falta de seriedad de las organizaciones políticas que en todo el estado, han sucumbido al encanto de la imposición cuando no, al color de los billetes, como se cree que sucedió en uno de los partidos más importantes de la entidad.
Y si a la caótica situación de las candidaturas en San Cristóbal se suma la anarquía de las autoridades municipales que han perdido el control aún sobre las recepcionistas que han convertido su empleo en confesionario o caja de espionaje público, la confianza de los electores se desploma sin tener claro un panorama que les permita elegir a una autoridad doméstica acorde con sus necesidades.
Durante el tiempo que Mariano Díaz Ochoa gobernó a San Cristóbal de las Casas, las sospechas de corrupción fueron constantes, al grado que hasta hoy no se clarifica el asunto del agua potable por cuyos actos sigue sin ser detenido un funcionario del Ayuntamiento de Comitán (de apellidos Albores Greene) a quien le achacaron algunas de las pillerías de ese Ayuntamiento. Díaz Ochoa siempre sostuvo al inculpado y le defendió de las acusaciones hasta que el agua les llegó al cuello y la permanencia de éste en la alcaldía puso en riesgo las ambiciones del entonces presidente municipal coleto. Mariano por su parte, se convirtió en un próspero constructor y empresario que supo aprovechar su cargo como diputado local para presionar a los alcaldes de su región para que le otorgasen sin los trámites de rigor, obras diversas con las cuales engrosase su peculio particular.
Por su parte, Enoch Hernández Cruz llegó hace algunos años a San Cristóbal con una mano adelante y otra atrás. Alcanzó la alcaldía y terminó siendo uno de los más ricos de esa ciudad sin que hasta ahora explique cómo hizo para “estirar” su sueldo de edil de tal manera que le alcanzara para adquirir propiedades por todas partes. Y por si eso fuera poco, Hernández Cruz convirtió la alcaldía en cueva familiar desde donde se atacó a sus opositores mediante un pasquín sin ética que hasta el día de hoy, mediante cobardes seudónimos, mantiene una línea de feroz ataque a sus contrincantes. Ese y no otro es el triste panorama de los coletos que no tienen más opción que elegir de entre los malos, al menos peor.

Panismo sin escrúpulos

Sí, pero también, mujeres panistas sin nociones de la equidad de género en la práctica, aunque su discurso sobre el tema sea incendiario. Ana Eliza López Coello, Promotora de la Mujer del PAN, olvidó sus arengas feministas y da a la incertidumbre electoral coleta, el ingrediente que hacía falta para alejar a los electores de las urnas: Desconoce los resultados de la encuesta interna que gana abrumadoramente la señora Tirsa Robles Ramírez e inclina sus ambiciones a favor de Juan José Román Cancino, cuyo resultado en esa encuesta, es patético. De tal forma que, contra pactos y acuerdos signados a favor del respeto democrático al interior del PAN, se convocó a una asamblea de delegados para éste domingo, lo que empieza a construir el camino de la debacle del blanquiazul en esa ciudad, toda vez que se echan para atrás en una decisión tomada y luego desechada como parte del burladero en que han caído desde que Víctor Méndez Sarmiento asumió la dirigencia panista y la convirtió en vertedero de basura política.
Llama la atención que en éste caso, sea una mujer la que traiciona a otra mujer; hay qué oír a la señora López Coello gritando a favor de los derechos de las mujeres y de espacios en los partidos para ocupar cargos de elección popular. Claro, como ella, se supone, ya tiene “amarrada” una curul plurinominal, las demás mujeres, que se rasquen como puedan. Lo malo es que deja un mal precedente para el resto de las mujeres y reconfirma las sospechas de todos: las “luchadoras feministas” en realidad, son peor que los machistas que persiguen, acosan, condenan y maldicen en sus discursos. Qué pena que entre mujeres se destrocen de esa forma.
Como vemos entonces, los coletos no tienen de dónde escoger. Dos candidatos corruptos y uno que podría salir del PAN, sin respaldo popular y con claros tintes antidemocráticos. ¿Y los partidos? Desgajándose lentamente. Pudriéndose en sus porquerías.

Tarjetero

*** A raíz de la colaboración de anteayer en la que se denuncia a Carlos Blas como un sujeto prepotente que pretende asumir la Oficialía Mayor del STJ, decenas de correos me fueron enviados para aplaudir tal denuncia. En uno de ellos leemos: “Señor Ksheratto: Qué bueno que desenmascara usted a Carlos Blas, que cuando el Lic. Milton Escobar Castillejos corrió a la magistrado Sonia Simán, él fue quien la puso de cabeza. Él proporcionó datos falsos para que la corrieran y ahora presume ser el mejor amigo de ella. No tiene vergüenza ese sujeto que se aprovecha de su cargo para acosar sexualmente a las mujeres. Aquí se dice que hay una ley “Blas” que quiere decir “o las das o te vas”. Tememos que si llega al cargo de Oficial Mayor, corra a muchas mujeres si no accedemos a sus bajos instintos. Ayúdenos, por favor, ya no queremos más despotismo en el Supremo Tribunal.” ¿Cómo será el tal Blas que casi en todos los correos expresan su temor de abusos de su parte. Insistiremos entonces en pedir cuidado a la hora de nombrar a los nuevos funcionarios del STJ. *** Crece la preocupación en la zona norte por los actos de desestabilización que promueve Jaime Ramírez Maza, en complicidad con Jorge Morales Messner. Algo se debe hacer urgentemente en esa región antes que la sangre llegue al río. *** Luego nos leemos.
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