Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
Evidentemente el proceso electoral de éste año está en una etapa incierta en virtud de la fragilidad de las instituciones electorales y la cada vez más preocupante indefinición ideológica de los partidos políticos, cuya única intención pareciera estar enfocada solamente a la persecución del poder, sin importar el tipo de alianzas que alcancen y las razones de fondo de éstas. A lo anterior agreguemos las intestinas luchas dentro de los organismos políticos por las candidaturas, pleitos que han alcanzado alarmantes resultados que nos indican que la cultura política en Chiapas ha caído en un denigrante pozo de malas intenciones y peores resultados.
Tomemos por ejemplo el caso de Comitán donde la lucha por una diputación y la alcaldía de esa importante ciudad, se ha convertido en una auténtica cena de negros cuyo principal comensal es el propio alcalde, Jorge Constantino Kanter que no ha cejado en su intención de imponerse él mismo como candidato a una curul y a un hermano suyo, como su sustituto en la Comuna Municipal.
Constantino Kanter, según tenemos noticias, ha copado todos los espacios políticos y ha tocado todos los extremos de la civilidad para lograr su propósito, aún cuando de sobra sabe que su función como jefe edilicio le ha restado credibilidad y confianza en su propio municipio y que en el resto de los componentes del distrito, carece de base social para una competencia sana y de altura. Lo peor: el alcalde comiteco insiste en ser abanderado por las siglas del Partido Revolucionario Institucional, pese a que ha sido expulsado de esa institución. La razón es bastante conocida. Ir como candidato de una alianza entre los partidos antagónicos al PRI, según ha dicho él mismo a sus más cercanos colaboradores, es ir a una derrota segura, dada la inconsistencia del PRD, el PT y Convergencia en esa zona de la entidad. Y es que, con todo y las torpezas políticas del tricolor, es el único partido que tendría la oportunidad de despertar a los electores el día de los comicios. Kanter busca el respaldo de su expartido, convencido de la mala fama del único candidato que ha sacado la cabeza en ese distrito, el ingeniero Guillermo Rodas, acusado de utilizar su cargo de diputado suplente de Roberto Ortiz para presionar y chantajear a los alcaldes de la región para que contraten sus servicios de constructor. Otro priísta que ha expresado su intención de ir como candidato es el empresario de embutidos Rigoberto Guillén Pérez, al que vendettas y engaños del pasado, le han sido suficientes para quedarse a medio camino, pese a su consistente trabajo en las bases sociales.
Leyes de adorno
Como Comitán, el resto de distritos y municipios, están en las mismas condiciones; es obvio que si el edil comiteco está en plena campaña por una curul, está violentando el frágil marco legal, lo cual, en términos de ajustes jurídicos, debería ser castigado. Pero no. La blandenguería de las autoridades electorales está muy por debajo de las expectativas de la sociedad y por tanto, podemos declararles incompetentes para actuar en consonancia con la ley. No vayamos lejos: el Tuxtla Gutiérrez, el diputado Bayardo Robles Riqué está en plena y abierta campaña de proselitismo, son que nadie ose por lo menos, advertirle que hay leyes que debe acatar. En Pijijiapan, Pedro Ibarra Campero, Saín Cruz Trinidad y Javier López Ramírez, han incluso, mandado a hacer pintas alusivas a sus respectivas campañas y tampoco se ha visto la mano de las autoridades electorales, pese a las denuncias formales que se han presentado a uno de los reductos del pablismo, la Contraloría de la Legalidad Electoral.
Del Tribunal Electoral, ni se diga; su presidente está, como ya lo hemos señalado en muchas ocasiones, inmerso en litigios penales en contra de los críticos de Pablo Salazar y al servicio de un exsenador de fuera, quien le dicta los pasos a seguir en esa destartalada institución. Y, obvio, a sus líos de índole privada con sus socias en el negocio de un kínder. Con esas condiciones, tenemos un panorama electoral en riesgo de desbordarse. Eso es grave para una democracia naciente y mucho peor si hemos descubierto que los organismos electorales son refugios de facinerosos del pablismo y de personas con un alto grado de ignorancia. Y no esperemos que hagan algo al respecto porque no tienen la capacidad para hacerlo.
Tarjetero
*** Ayer comentamos el caso de los familiares de Ángel René Estrada Arévalo que forman el orgulloso nepotismo del rector de la UNACH. Ayer mismo se nos informó que César Orozco Arévalo, primo hermano de Ángel René, ocasionó un grave accidente cuando manejaba en estado de ebriedad y con exceso de velocidad. Según los testigos, el prepotente sujetillo de marras y funcionario universitario, tuvo un comportamiento agresivo, aludiendo, obviamente, sus lazos de parentesco y laborales con el jefe de esa máxima casa de estudios. ¡Qué vergüenza! Aparte de avorazados, abusivos. *** El recién nombrado director del penal de Pichucalco prohibió el ingreso de agua y miel para Armando Valencia, reo que se puso en huelga de hambre por los abusos cometidos en su contra. Su estado de salud sigue siendo grave, notificaron sus familiares. ¿Hasta cuándo cesará el odio de las autoridades penitenciarias contra un prisionero que no quiso cumplir una oprobiosa orden? *** Insistimos: la reconstrucción no estará completa hasta que no se lleve a los tribunales a quienes lucraron con la desgracia de miles de damnificados. Es decir, hasta que no quede en la impunidad el abuso del exgobernador Pablo Salazar en contra de esa pobre gente a la que mintió y engañó descaradamente. No entenderemos jamás los discursos a favor de la reconstrucción sin saber a ciencia cierta el destino de quienes se robaron el dinero que había sido destinado para ayudar a las víctimas de ese desastre natural. Felipe Calderón no puede convertirse en cómplice o tapadera de esos deleznables actos. *** Luego nos leemos.
http://www.cuartopoder.com.mx
ksheratto@yahoo.com
ksheratto@hotmail.com
Angel Mario Ksheratto
Evidentemente el proceso electoral de éste año está en una etapa incierta en virtud de la fragilidad de las instituciones electorales y la cada vez más preocupante indefinición ideológica de los partidos políticos, cuya única intención pareciera estar enfocada solamente a la persecución del poder, sin importar el tipo de alianzas que alcancen y las razones de fondo de éstas. A lo anterior agreguemos las intestinas luchas dentro de los organismos políticos por las candidaturas, pleitos que han alcanzado alarmantes resultados que nos indican que la cultura política en Chiapas ha caído en un denigrante pozo de malas intenciones y peores resultados.Tomemos por ejemplo el caso de Comitán donde la lucha por una diputación y la alcaldía de esa importante ciudad, se ha convertido en una auténtica cena de negros cuyo principal comensal es el propio alcalde, Jorge Constantino Kanter que no ha cejado en su intención de imponerse él mismo como candidato a una curul y a un hermano suyo, como su sustituto en la Comuna Municipal.
Constantino Kanter, según tenemos noticias, ha copado todos los espacios políticos y ha tocado todos los extremos de la civilidad para lograr su propósito, aún cuando de sobra sabe que su función como jefe edilicio le ha restado credibilidad y confianza en su propio municipio y que en el resto de los componentes del distrito, carece de base social para una competencia sana y de altura. Lo peor: el alcalde comiteco insiste en ser abanderado por las siglas del Partido Revolucionario Institucional, pese a que ha sido expulsado de esa institución. La razón es bastante conocida. Ir como candidato de una alianza entre los partidos antagónicos al PRI, según ha dicho él mismo a sus más cercanos colaboradores, es ir a una derrota segura, dada la inconsistencia del PRD, el PT y Convergencia en esa zona de la entidad. Y es que, con todo y las torpezas políticas del tricolor, es el único partido que tendría la oportunidad de despertar a los electores el día de los comicios. Kanter busca el respaldo de su expartido, convencido de la mala fama del único candidato que ha sacado la cabeza en ese distrito, el ingeniero Guillermo Rodas, acusado de utilizar su cargo de diputado suplente de Roberto Ortiz para presionar y chantajear a los alcaldes de la región para que contraten sus servicios de constructor. Otro priísta que ha expresado su intención de ir como candidato es el empresario de embutidos Rigoberto Guillén Pérez, al que vendettas y engaños del pasado, le han sido suficientes para quedarse a medio camino, pese a su consistente trabajo en las bases sociales.
Leyes de adorno
Como Comitán, el resto de distritos y municipios, están en las mismas condiciones; es obvio que si el edil comiteco está en plena campaña por una curul, está violentando el frágil marco legal, lo cual, en términos de ajustes jurídicos, debería ser castigado. Pero no. La blandenguería de las autoridades electorales está muy por debajo de las expectativas de la sociedad y por tanto, podemos declararles incompetentes para actuar en consonancia con la ley. No vayamos lejos: el Tuxtla Gutiérrez, el diputado Bayardo Robles Riqué está en plena y abierta campaña de proselitismo, son que nadie ose por lo menos, advertirle que hay leyes que debe acatar. En Pijijiapan, Pedro Ibarra Campero, Saín Cruz Trinidad y Javier López Ramírez, han incluso, mandado a hacer pintas alusivas a sus respectivas campañas y tampoco se ha visto la mano de las autoridades electorales, pese a las denuncias formales que se han presentado a uno de los reductos del pablismo, la Contraloría de la Legalidad Electoral.Del Tribunal Electoral, ni se diga; su presidente está, como ya lo hemos señalado en muchas ocasiones, inmerso en litigios penales en contra de los críticos de Pablo Salazar y al servicio de un exsenador de fuera, quien le dicta los pasos a seguir en esa destartalada institución. Y, obvio, a sus líos de índole privada con sus socias en el negocio de un kínder. Con esas condiciones, tenemos un panorama electoral en riesgo de desbordarse. Eso es grave para una democracia naciente y mucho peor si hemos descubierto que los organismos electorales son refugios de facinerosos del pablismo y de personas con un alto grado de ignorancia. Y no esperemos que hagan algo al respecto porque no tienen la capacidad para hacerlo.
Tarjetero
*** Ayer comentamos el caso de los familiares de Ángel René Estrada Arévalo que forman el orgulloso nepotismo del rector de la UNACH. Ayer mismo se nos informó que César Orozco Arévalo, primo hermano de Ángel René, ocasionó un grave accidente cuando manejaba en estado de ebriedad y con exceso de velocidad. Según los testigos, el prepotente sujetillo de marras y funcionario universitario, tuvo un comportamiento agresivo, aludiendo, obviamente, sus lazos de parentesco y laborales con el jefe de esa máxima casa de estudios. ¡Qué vergüenza! Aparte de avorazados, abusivos. *** El recién nombrado director del penal de Pichucalco prohibió el ingreso de agua y miel para Armando Valencia, reo que se puso en huelga de hambre por los abusos cometidos en su contra. Su estado de salud sigue siendo grave, notificaron sus familiares. ¿Hasta cuándo cesará el odio de las autoridades penitenciarias contra un prisionero que no quiso cumplir una oprobiosa orden? *** Insistimos: la reconstrucción no estará completa hasta que no se lleve a los tribunales a quienes lucraron con la desgracia de miles de damnificados. Es decir, hasta que no quede en la impunidad el abuso del exgobernador Pablo Salazar en contra de esa pobre gente a la que mintió y engañó descaradamente. No entenderemos jamás los discursos a favor de la reconstrucción sin saber a ciencia cierta el destino de quienes se robaron el dinero que había sido destinado para ayudar a las víctimas de ese desastre natural. Felipe Calderón no puede convertirse en cómplice o tapadera de esos deleznables actos. *** Luego nos leemos.
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