Fichero Político
Angel Mario Ksheratto
La de Alfredo Palacios ha sido una historia de mitos y sospechas; de maestro respetable cuando impartía clases a muchachas adolescentes, a propietario de una suspicaz reputación que cargó hasta el día en que, recuperada la buena fama mediante argucias políticas, asumió como Secretario de Educación en las primeras horas del gobierno pablista y otra vez, bajo sospecha de perjurio al descubrirse que todos los proyectos educativos que supuestamente llevó a cabo en el sexenio pasado, resultaron una farsa que al final de cuentas, le tiene despreocupado a tal grado que, con todo y la pesada carga, ahora se le identifica como el cambiario inútil de una campaña de ataques contra su actual jefe y sus aliados. Ése es, en síntesis, el largísimo historial de un hombre que no tuvo la dignidad suficiente para retirarse a la vida privada una vez que vio sus ambiciones satisfechas y que se dio cuenta del fracaso de su pretendido ideal educativo. Jefe de un grupo de desertores de la redacción y pusilánimes pablistas –también bajo sospecha–, Palacios no ha querido explicar las razones por las que, de la noche a la mañana, decidió patear su suerte y emprender una feroz campaña de desprestigio contra los críticos del pabliato, llegando al grado de intentar la creación de una “organización social” encargada de “denunciar” los excesos del gobierno para el que trabaja, difundiendo, mediante los oficios de Norberto Chamé Solar y David Tovilla Santiago, una serie de falsedades que benefician en primer lugar, a Rubén Velásquez y en segundo, blanquear la derruida imagen del exgobernante Salazar, con quien, se dice, se reúnen periódicamente en una oficina secreta que éste mantiene abierta en la capital de Chiapas.
La explicación al proceder de los pablistas, según se empieza a saber, se debe a que, derivado de las auditorias practicadas a diversas dependencias del sexenio pasado, existe la posibilidad de que éstos y otros funcionarios de ése régimen, estén seriamente implicados en actos de corrupción de la que sólo se salvarían si logran su máxima meta: derrocar –de la forma que puedan– al sucesor de Pablo para entronizar a Velásquez y evitar que paguen por sus delitos oficiales. De hecho, trascendió que la investigación que ya se realiza a
Corte de tajo
Lo hemos dicho desde el inicio del actual gobierno. Los pablistas buscarán a toda costa volver por sus fueros; saben a ciencia cierta que su carta fuerte, el flamante senador Velásquez, no ganaría ni un juego de canicas y por lo mismo, su única alternativa es mediante un interinato. Solo que para lograr eso, habrán de esperar dos años pues antes, la ley ordena que se celebren comicios. Ante esa disyuntiva, el actual gobernador debe poner sus barbas en remojo y cortar de tajo con quienes, desde dentro de la misma burbuja de poder que comparten están saliendo las bocanadas de “fuego amigo”, lo cual debe ser interpretado como una deslealtad. Los caporales de la hacienda del pablismo, no pueden ni deben continuar usufructuando un poder que utilizaron mal y el gobierno de Sabines Guerrero, está obligado a ofrecer garantías a los chiapanecos. Suficiente daño hizo Palacios, por ejemplo, a la educación, como para que ahora, desde la cueva en que ha convertido la cuna de la cultura doméstica, opere a favor de una pandilla de malos ciudadanos que ya demostraron que no saben hacer otra cosa que saquear el erario público.
Por otro lado, los resultados de las auditorias que se están realizando a las dependencias bajo sospecha de corrupción, deben ser hechos públicos. Y no solo eso, sino que se debe proceder penalmente en contra de quienes hicieron mal uso de los recursos públicos para enriquecerse. Solo así podremos tener certeza de que este gobierno está haciendo bien las cosas. No se trata de simples venganzas, sino de actos de justicia apegados a derecho, actos que queden en la memoria del pueblo para que nunca más volvamos a ser víctimas de saqueadores y malos funcionarios. Ya basta de militantes pablistas que pretenden desestabilizar al estado con actos deleznables. ¡Ya basta!
Tarjetero
*** Mi colega y entrañable amigo, Miguel González Alonso, recién ratificado en la dirigencia del Frepech, partió ayer a la capital de la república para asistir a una comida en el Club de Periodistas a la que fue invitado especial y donde aprovechará para agradecer la solidaridad de ese gremio con los periodistas de Chiapas. *** Calientes los tiempos electorales, en Comitán, dicen, no hay más que dos candidatos fuertes, para los partidos que quieran, con eso que ahora, la identidad ideológica es menos que nada. Rigoberto Guillén Pérez y Jorge Constantino Kanter, actual alcalde comiteco. ¿Se imagina a Kanter de diputado? Si solito se emperra con lo que él mismo dice, será interesante ver los agarrones que se de con el resto de legisladores. Va a estar divertido. En cuanto a Guillén Pérez, solo que Arnulfo Cordero, sin capacidad política, le ponga piedras en el camino. *** ¡Jo! Tronco de candidata a la alcaldía capitalina la del Verde Ecologista. Los demás partidos, que ni se metan; el carisma, la capacidad, la inteligencia… bueno, ¡todo!, los va a dejar en la calle. Lo tiene la señora candidata. ¡Ja!. *** Alguna autoridad debe revisar la higiene del restaurante “